El Papa, en la audiencia: «Dios nunca impone su voluntad. Quiere ser amado y no temido»

El Papa ya no habla de una Tercera Guerra Mundial «a cachitos», ahora ya advierte sin tapujos de que estamos viviendo una Tercera Guerra Mundial evidentemente global. Así lo ha asegurado este miércoles 31 de agosto, al final de la audiencia general, durante el saludo a los fieles de lengua polaca.

«Mañana se recordará el aniversario del estallido de la Segunda Guerra Mundial, que tan dolorosamente marcó a la nación polaca. Y hoy estamos experimentando la Tercera. Que el recuerdo de las experiencias pasadas los impulse a cultivar la paz en vosotros mismos, en sus familias, en la vida social e internacional», pidió Francisco.

Uno de los frentes de este conflicto global se encuentra en Ucrania, país que volvió a estar en los labios del Pontífice. «Recemos de manera especial por el pueblo ucraniano», insto el Santo Padre, quien también se refirió a los «acontecimientos violentos» que se están registrando en Irak tras la dimisión del líder chiíta, el clérigo Moqtada al-Sadr. «Pidamos a Dios en la oración que dé la paz al pueblo iraquí. El año pasado tuve la alegría de visitar Irak y sentí de primera mano el gran deseo de normalidad y convivencia pacífica entre las diferentes comunidades religiosas del país. El diálogo y la fraternidad son el camino para afrontar las dificultades actuales y alcanzar este objetivo», aseguró.

Por último, el pensamiento de Francisco se dirigió a los ciudadanos de Amatrice, Accumuli y Arquata del Tronto presentes en el Aula Pablo VI. El 24 de agosto de 2016 un violento terremoto sacudió el centro de Italia arrasando esas ciudades y pueblos. Solo en Amatrice hubo 237 víctimas. «Al recordar en la oración a los difuntos, renuevo la cercanía al corazón de sus familias». De ahí la esperanza de que la ayuda institucional y la de las «personas de buena voluntad» continúe para que podamos avanzar hacia el «renacimiento».

Ciclo sobre el discernimiento

Antes de todos estos pronunciamientos, el Papa habló sobre el discernimiento, tema al que le dedicará un puñado de catequesis después de haber concluido el ciclo sobre la vejez. «El discernimiento es un acto importante que concierne a todos, porque las elecciones son una parte esencial de la vida. Uno elige la comida, la ropa, un curso de estudio, un trabajo, una relación. En todos ellos se realiza un proyecto de vida, y también nuestra relación con Dios», dijo Francisco en un primer momento.

Pero el discernimiento «implica esfuerzo», ha subrayado el Pontífice. «Dios nos invita a evaluar y elegir: nos ha creado libres y quiere que ejerzamos nuestra libertad. Por lo tanto, discernir es un reto».

En esa elección, sin embargo, es imprescindible recordar «que eres una criatura, que no eres el criterio del bien y del mal, y que las elecciones que hagas tendrán una consecuencia, para ti, para los demás y para el mundo». De esta forma, «puedes hacer de la tierra un magnífico jardín o puedes convertirla en un desierto de muerte».

En cualquier caso, «Dios es Padre y no nos deja solos, siempre está dispuesto a aconsejarnos, a animarnos, a acogernos. Pero nunca impone su voluntad. “¿Por qué?” Porque quiere ser amado y no temido. Y el amor solo puede vivirse en libertad. Para aprender a vivir hay que aprender a amar, y para ello es necesario discernir».

Denzel Washington con el Papa

Precisamente, con ese afán de discernimiento, de reflexión, el Vaticano va a acoger entre el 31 de agosto y el 1 de septiembre la primera edición del Vitae Summit. Se trata de un encuentro que ahondará en cómo las artes, los medios de comunicación y el entretenimiento pueden promover el bien común y fomentar una cultura del encuentro.

Al evento, en el que también se espera la participación de Francisco, acudirá gente como el actor estadounidense Denzel Washington, el tenor italiano Andrea Bocelli, la diseñadora de moda Eva Cavalli, los actores británicos Jessica y David Oyelowo, el director estadounidense Isaac Chung o la cantante canadiense Alessia Cara.