El Papa en el ángelus: «Reconozcamos a Jesús en los pobres y abandonados» 

«¡A todos, Jesús, príncipe de la paz, trae paz y serenidad!». Con esta petición, el Papa Francisco ha vuelto a reivindicar la paz durante el rezo mariano del Ángelus de este lunes, en el que se celebra la Epifanía del Señor. En esta ocasión, ha recordado especialmente a las comunidades eclesiales de Oriente que están celebrando la Navidad, y ha reiterado su cercanía y oración por todas las víctimas de los conflictos y guerras que asolan el mundo.

En la catequesis, el Pontífice ha hecho alusión el evangelio de este lunes, en el que los tres magos, tras un largo viaje, llegan guiados por una estrella a Jerusalén para adorar al Niño Jesús. «Si prestamos atención, descubriremos algo un poco extraño: mientras los sabios llegan desde lejos para encontrar a Jesús, los que están cerca no dan un paso hacia la gruta de Belén», ha explicado. «Están satisfechos con lo que tienen y no emprenden la búsqueda, no creen que merezca la pena salir de Jerusalén, aunque sólo sean unos pocos kilómetros».

Sin embargo, estos magos «afrontan enormes gastos, ofrecen su tiempo y aceptan los riesgos e incertidumbres. Superan todas las dificultades para llegar a ver al Rey Mesías, porque saben que está sucediendo algo único en la historia de la humanidad y no quieren faltar a la cita».

De esta manera, Francisco ha invitado a reflexionar sobre nuestra propia vida y preguntarnos si nos parecemos más a los pastores, que fueron de prisa a la gruta, «o a los Reyes Magos, que parten confiadamente». Ante una plaza abarrotada, el Santo Padre también ha recordado que Dios fue «nacido de mujer, pequeño y necesitado de todo», y ante eso, ha invitado a preguntarnos si nosotros respondemos saliendo a su encuentro o seguimos nuestro camino como si nada.

«Pidamos a la Virgen María que nos ayude para que, imitando a los pastores y a los Magos, sepamos reconocer a Jesús cerca de nosotros, en la Eucaristía, en los pobres, abandonados y encarcelados», ha finalizado el Pontífice.