El Papa dona a la Iglesia ortodoxa griega tres piezas del Partenón

El Papa ha decidido devolver los fragmentos de mármol del Partenón de Atenas custodiados en los Museos Vaticanos desde el siglo XIX, según ha anunciado este viernes la Santa Sede en un comunicado.

En el comunicado, se explica que este gesto es una «donación» del Papa al arzobispo ortodoxo de Atenas y cabeza de la Iglesia ortodoxa griega, Jerónimo II. Se trata de «un signo concreto de su deseo sincero de seguir el camino ecuménico de la verdad».

El Obispo de Roma mantiene una relación cordial con el primado griego. En 2016, protagonizaron juntos, con el patriarca ecuménico Bartolomé, una histórica visita a los refugiados de la isla de Lesbos. Además hace un año, los días 4 y 5 de diciembre de 2021, ambos volvieron a reunirse en el marco del viaje de Francisco a Chipre y Grecia.

La formulación del comunicado implica que la decisión del Papa no es fruto de una decisión bilateral entre la Santa Sede y Grecia ni fruto de una petición por parte del país heleno. Según apunta la agencia AP, podría tratarse de un intento de no sentar un precedente que pudiera a los Museos Vaticanos a tener que desprenderse de otras piezas de valor incalculable.

Rechazo del Museo Británico

Las obras que se donan a la Iglesia ortodoxa griega son restos de la decoración del friso de 160 metros que rodeaba la fachada del Partenón dedicado a Atenea en la Acrópolis, construido en el siglo V a. C. Buena parte del friso se perdió en el siglo XVII durante un bombardeo, y la mitad de lo que quedó se la apropió el diplomático británico lord Elgin a comienzos del siglo XIX.

Hace poco, algunos medios informaron de que el presidente del Museo Británico había mantenido conversaciones secretas con el primer ministro de Grecia para el retorno de estas piezas. Sin embargo, poco después el museo se comprometió a no desmantelar su colección.

La donación de los restos del Partenón se produce dos meses después del acuerdo firmado a mediados de octubre por el presidente de la Gobernación vaticana, cardenal Fernando Vérgez, y el ministro de Asuntos Exteriores de la República del Perú, César Rodrigo Landa Arroyo, para repatriar a Perú tres momias antiguas.

Según un comunicado de los Museos Vaticanos, estas piezas artísticas van a ser investigadas para determinar el período de su origen. No obstante, se sabe que se encontraron a 3.000 metros de altura en los Andes peruanos, a lo largo del curso del río Ucayali, afluente del Amazonas. Se encontraban en el Vaticano tras ser cedidas para la Exposición Universal de 1925.