El obispado de Tortosa se muestra «cercano y atento» a los afectados por el incendio en Paüls

El incendio que se declaró el pasado lunes en Paüls (Tarragona), que ha calcinado unas 3.200 hectáreas, continúa activo tras una noche en la que más de 460 efectivos con 120 vehículos han continuando trabajando intensamente para cerrar el perímetro y estabilizar el fuego.

Ante la gravedad del incendio, la diócesis de Tortosa, con el obispo Sergi Gordo a la cabeza, han lamentado «esta situación que nos priva de la belleza de una parte importante de la creación de Dios en las tierras del bajo Ebro», han asegurado en un comunicado.

Asimismo, se muestran «cercanos y atentos a todas las personas afectadas y sus necesidades» y han pedido «plegarias, especialmente por estas personas y poblaciones implorando que pronto se pueda extinguir el incendio y volver a la vida diaria con normalidad».

Según han informado los Bomberos de la Generalidad de Cataluña, quedan aún dos puntos de difícil acceso, uno en Paüls, en el que se está actuando con medios aéreos desde primera hora de esta mañana, y otro en el término de Alfara de Carles. Aun con todo, son optimistas y creen que las llamas se podrían estabilizar en las próximas horas.

Por último, Gordo, todos los sacerdotes, diáconos, miembros de la vida consagrada y fieles laicos —se detalla en la nota— han agradecido «el servicio de quienes están trabajando desde el primer momento, algunos poniendo en riesgo su vida, para que se pueda poner pronto el punto final».