El IOR informa de un beneficio de 29,6 millones en 2022

El Instituto para las obras de Religión (IOR), conocido popularmente como Banco vaticano, obtuvo un beneficio neto de 29,6 millones durante el año 2022, que son 11 millones más de lo que consiguió el año anterior, unos resultados que sitúan a la entidad «entre las instituciones mejor clasificadas del mundo» en la calificación de Moneyval, según ha informado el IOR en un comunicado.

La obtención de este resultado ha sido posible, en gran medida, gracias a que la entidad ha podido recuperar —tras un largo proceso judicial— una importante suma de dinero, 17,2 millones de euros, que le fueron sustraídos al Instituto hasta el año 2014. «Se ha tomado conciencia de que el Instituto forma parte de un organismo mucho más grande e importante», como es la Santa Sede, lo que ha contribuido a disminuir la conciencia de «estar por encima de cualquier norma», ha indicado Battista Ricca, prelado del IOR. Por otro lado, «el fantasma de las catástrofes del pasado siempre está ahí para mantenernos con los ojos bien abiertos».

Otros aspectos que han contribuido al éxito de la entidad en el año 2022 han sido «la mejora continua de la gestión de las inversiones, la ampliación de las políticas éticas, la introducción de una nueva plataforma informática, la contratación de más profesionales y la introducción de una política de evaluación del personal y sistema de incentivos que introduce un sistema de remuneración transparente y estructurado basado en los resultados alcanzados», ha explicado el presidente del IOR, Jean-Baptiste de Franssu.

Distribución de beneficios

Una parte del dinero obtenido se guardará por indicación del Consejo de Superintendencia del IOR, que recomendó a la Comisión Cardenalicia que mantuviera una «política prudente en la distribución de dividendos como en 2022». La decisión se ha visto motivada por «las recientes crisis bancarias de Estados Unidos y Europa» y «por la necesidad de proteger al Instituto a largo plazo, dado el peculiar contexto en el que actúa».

De esta forma, el IOR ha decidido que solo distribuirá 5,2 millones de euros del total obtenido. En concreto, destinará tres millones de euros a las obras religiosas del Papa Francisco, dos millones a las actividades caritativas de la Comisión Cardenalicia y 200.000 euros a las actividades también de carácter caritativo del prelado del Instituto.

Ética católica

Por otro lado, el director general de la entidad, Gian Franco Mammì, ha informado de que «los activos del estado patrimonial del IOR ascendían a 2.800 millones de euros». La cifra, según Mammì, habla de la «elevada solidez de capital y su robusta liquidez», con parámetros «muy por encima de las exigencias reglamentarias, lo que lo convierte en uno de los Institutos más sólidos del panorama bancario internacional».

Por último, el director general de la entidad ha explicado que el IOR «es la única institución financiera al servicio de la Iglesia en el mundo que basa su actividad en el principio de coherencia con la ética católica y no en el principio del mayor beneficio posible, respetando las normas y las mejores prácticas bancarias internacionales».