El hombre, en situación de emergencia
La ciudad italiana de Rimini acogió, del 18 al 24 de agosto, la XXXIV edición del Meeting por la Amistad entre los Pueblos. El tema elegido este año era Emergencia-hombre. Las sesiones sobre libertad religiosa y los países en situación de conflicto tuvieron un especial protagonismo
Las palabras del Papa Francisco resonaron con fuerza durante el Meeting de Rimini 2013, un relevante acontecimiento socio-religioso internacional que organiza Comunión y Liberación desde hace 34 años. El Pontífice denunció el comportamiento de los poderes económico y político, que instrumentalizan al hombre «para perpetuarse y engordarse a sí mismos» y, a menudo, intentan «manipular las masas, provocarles deseos, borrar lo más precioso que posee el hombre: su relación con Dios». Y es que «el poder teme a los hombres que dialogan con Dios», denunció el Papa.
Su mensaje aludía a «la urgencia de devolver al hombre a sí mismo, a su altísima dignidad, a la unidad y la preciosidad de cada existencia humana desde su concepción hasta su fin natural». Pero, según aclaró, emergencia-hombre significa «la emergencia de volver a Cristo, de aprender a mirar como Él la verdad de nosotros mismos y del mundo, y con Él y en Él, salir al encuentro de los hombres, sobre todo de los más pobres, los preferidos de Jesús», añadió el Santo Padre. Esa pobreza no es sólo la material. «Existe una pobreza espiritual que amenaza al hombre contemporáneo», explicó. «La pobreza más grande, de hecho, es la falta de Cristo, y hasta que no llevemos a Jesús a los hombres, habremos hecho por ellos demasiado poco».
Uno de los temas centrales tratados en el Meeting fue la libertad religiosa, sistemáticamente vulnerada en buena parte del mundo. «Cuando hablamos de libertad de religión, no hablamos de religión, sino de un derecho», resaltó el cardenal Jean Louis Tauran, Presidente del Consejo Pontificio para el Diálogo interreligioso. El cardenal francés recordó la importante contribución de los cristianos al progreso de la sociedad, «una riqueza de valores que es un bien para creyentes y no creyentes».
Los cristianos son las principales víctimas de la persecución religiosa en el mundo, según recordó el ex-ministro de Relaciones Exteriores de Italia, Franco Frattini, que resaltó que, cada año, «unos 100 mil cristianos son asesinados debido a su fe». De ello habló en primera persona el ex-ministro para la Armonía y consejero del Primer Ministro en materia de Minorías Religiosas de Pakistán, Paul Bhatti, cuyo hermano Shahbaz fue asesinado en 2011 por ser cristiano. «Los occidentales tienen dificultad para comprender la necesidad de defender la libertad religiosa, porque en sus países no se llega a morir» por la fe, dijo.
Franco Frattini manifestó su deseo de que, en el primer semestre del 2014, cuando Italia esté a cargo de la presidencia europea, se ocupe no sólo de temas económicos, sino también «de los derechos de la persona y, entre éstos, el de profesar la propia fe». Hacía así suya la petición lanzada por los organizadores del Meeting: «Les pedimos a las instituciones nacionales y a los organismos internacionales, de conformidad con las normas del derecho internacional, que hagan todo lo posible para defender, proteger y garantizar la existencia de los cristianos por doquier en el mundo». Y asimismo «pedimos que se les reconozca a los cristianos el derecho elemental a buscar y atestiguar la verdad, sin limitaciones de su libertad tanto de expresión como de asociación».