El Comercio Justo «pone a la persona en el centro»
Con el lema Somos Comercio Justo, miles de personas de más de 50 localidades españolas se unen a la celebración del Día Mundial del Comercio Justo, que se celebra este sábado, 12 de mayo. En el manifiesto por la jornada reclamarán que «otro modelo económico y social donde los Derechos Humanos y el medioambiente estén en el centro de nuestra actividad económica»
Con esta jornada, el movimiento global del Comercio Justo —que integra a más de dos millones de productores y trabajadores en todo el mundo, y en nuestro país a más de 2600 personas voluntarias y 135 profesionales—, recuerda que es posible garantizar una vida digna para todos los habitantes del planeta y frenar la degradación medioambiental. Así lo ha constatado Naciones Unidas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible que deberían cumplirse antes del 2030 y entre los que figura el fomento del consumo responsable y una producción más sostenible.
Cáritas se suma, a través de la Red Interdiocesana de Comercio Justo, al programa de actividades y movilizaciones que ha convocado en todo el país la Coordinadora Estatal de Comercio Justo, de la que forma parte. En todos estos actos se procederá a la lectura del manifiesto, en el que se reclama «otro modelo económico y social donde los Derechos Humanos y el medioambiente estén en el centro de nuestra actividad económica».
Además, se recuerda que «millones de personas que están detrás de los productos que consumimos sufren insoportables formas de explotación, aún presentes en el siglo XXI». Esta explotación, añaden, «no es circunstancial o una práctica aislada en un sector concreto o en una cadena de suministro». La obtención del máximo beneficio económico, «regla que rige nuestro sistema, impone la depredación de los recursos naturales y la explotación laboral».
Apuesta de Cáritas por el Comercio Justo
La opción por el Comercio Justo es uno de los ejes en los que se apoya la apuesta de Cáritas en España. «Se trata de una opción que pone a la persona en el centro, que está al servicio de los derechos humanos y que da prioridad al cuidado de la Creación, en coherencia con el magisterio del Papa Francisco en la encíclica Laudato si», explican desde la organización.
Favorecer las relaciones éticas y equitativas que respeten los derechos de las personas a lo largo de toda la cadena de producción, distribución y comercialización es el objetivo del compromiso de Cáritas en este ámbito, que se lleva a cabo a través de la Red Interdiocesana de Comercio Justo (RICJ). Integrada por 28 Cáritas Diocesanas, esta red cuenta con 20 tiendas y 57 puntos de venta en toda España.
Las tiendas y puntos de venta actúan también como centros de información sobre el origen de los productos y las prácticas injustas del comercio, de movilización en campañas de incidencia y de punto de encuentro de consumidores responsables. En muchas de las tiendas de la red, el Comercio Justo comparte espacio con productos artesanos, reciclados y sostenibles procedentes de la economía social.
Aunque la principal actividad de la Red Interdiocesana de Comercio Justo de Cáritas es la sensibilización y la transformación para un consumo más responsable, en 2017 se comercializaron a través de las tiendas y puntos de venta más de 600.000 euros.
Cáritas / Redacción