El belén salta a las redes sociales

Fotos: Diócesis de Ávila

Cuidar de nuestras tradiciones, de las raíces de nuestra fe, es algo que siempre debiéramos fomentar. Y más hoy en día, en este tiempo de Adviento y Navidad, que muchos se empeñan en despojar de todo vestigio religioso, sin darse cuenta de que caen en una contradicción in terminis. Pues, ¿qué se festeja en Navidad, más que la venida del Hijo de Dios?

Por ello, desde la diócesis de Ávila se puso en marcha hace unos días la iniciativa #YoPongoElBelén. Es el segundo año que se lleva a cabo, y la acogida es impresionante. El objetivo es llenar las redes sociales de imágenes de belenes, de nuestra Navidad cristiana (si es que estos vocablos no incurren en un pleonasmo innecesario). De esta manera, se anima a todo el que lo desee a subir las fotos de sus nacimientos a Facebook y Twitter con la etiqueta #YoPongoElBelén. Así mostramos la alegría y la fe del pueblo cristiano que mantiene arraigadas sus tradiciones navideñas. Unas tradiciones que forman parte del patrimonio de nuestra fe y de nuestra cultura. Fomentarlas significa mantener vivo el espíritu de los momentos iniciales de una bella historia de vida y salvación: la que nos ofrece Jesús desde su humilde pesebre.

Y los internautas han respondido. En solo una semana, ya hay cientos de imágenes de belenes de sus casas, de la habitación de los niños, el del pueblo, el del seminario, el del colegio o la oficina. Unos más sencillos, con José, María y Jesús. Otros infantiles, para poder jugar con ellos. Hay hasta comestibles. Y otros hasta de tres pisos. Todos los materiales sirven, desde la goma eva hasta la cerámica más labrada.

Lo que de verdad importa es lo que encierran en sus imágenes, en cada pastor, en cada ángel, en cada rey mago.

Otras diócesis españolas (Vitoria, Zaragoza, Sevilla, Palencia, Madrid), federaciones de belenistas y congregaciones se han sumado a esta iniciativa que renueva tecnológicamente aquella tradición que inició san Francisco hace casi 800 años: representar el nacimiento de Jesús para que su historia de esperanza fuese conocida por todos.