«El arte sacro es una vía para evangelizar»
La Iglesia en España custodia 3.168 bienes de interés cultural que suponen una riqueza artística para la sociedad y «una oportunidad para que llevemos el primer anuncio del Evangelio a personas alejadas». Lo dice monseñor Jesús García Burillo, obispo de Ávila y presidente de la Comisión de Patrimonio Cultural de la Conferencia Episcopal Española, que concluye hoy una semana de trabajos en la ciudad abulense
De los 44 monumentos españoles que son Patrimonio de la Humanidad, 22 tienen el sello de católico. En toda España, la Iglesia pone a disposición de la sociedad 3.168 bienes de interés cultural, rige 616 santuarios y organiza 181 fiestas religiosas que cuentan con la declaración de interés turístico nacional, internacional o de Patrimonio Cultural Inmaterial por la UNESCO, según la Memoria Anual de Actividades de la Iglesia Católica en España. Y eso, por no hablar de todo el arte sacro que se conserva en museos de titularidad civil. Todo este patrimonio histórico-artístico «es una riqueza extraordinaria para la sociedad, y una oportunidad para que llevemos a cabo el primer anuncio del Evangelio, sobre todo a personas alejadas de Dios, que muestren inquietud y aprecio por la belleza. Porque el arte sacro y el patrimonio cultural de la Iglesia son, por origen y función, una vía para llegar a Dios». Así lo explica monseñor Jesús García Burillo, obispo de Ávila y presidente de la Comisión de Patrimonio Cultural de la CEE. Una Comisión que desde el pasado lunes y hasta hoy ha reunido a los delegados de Patrimonio de todas las diócesis españolas para celebrar en Ávila las Jornadas La pastoral de la santidad a través del arte, con ponencias como La justificación del culto a las imágenes, La iconografía, instrumento para evangelizar; o La piedra al servicio del espíritu.
Del arte a la santidad
El secretario general de Las Edades del Hombre, la directora de Comunicación de la productora European Dreams Factory, o el director del Archivo de la Compañía de María, de Roma, son algunos de los ponentes que han marcado la pauta para, como explica monseñor García Burillo, «evangelizar mejor desde el arte. Porque la belleza es capaz de conmover a la persona, y el arte sacro permite no sólo mirar, sino también admirar. Es entonces cuando tenemos que plantear la pastoral de la santidad, es decir, que el amor de Dios nos anima a ser santos». Buen ejemplo de que el arte lleva a Dios es la exposición Las Edades del Hombre: «Hay personas que la visitan por estética, pero que después se conmueven ante una obra, o que perciben la vida de los santos, como en esta edición de santa Teresa, de forma que les toca el corazón. Hace poco, un muftí me decía que, tras ver la exposición, había valorado mejor a la Santa», dice el obispo de Ávila. Y concluye: «El arte es un camino de evangelización que debemos potenciar».