Dos lavanderías a nombre del Papa para dignificar a las personas sin hogar

La Comunidad de Sant’Egidio de Turín ha inaugurado en su ciudad dos Lavanderías del Papa Francisco con el apoyo de la Limosnería Apostólica, que encabeza el cardenal polaco Konrad Krajewski. Desde el 2 de noviembre servirán a las personas sin recursos que acudan a la parroquia San Giorgio Martire y a la Casa de Amistad La Sosta, un ente benéfico muy arraigado en la urbe. Sus beneficiarios podrán atender su higiene personal, lavar y secar su ropa (también sus mantas) para cubrir sus necesidades básicas y fortalecer su autoestima y dignidad.

El proyecto profundiza en un esfuerzo de la Santa Sede por atender a las personas sin hogar. No es la primera vez que se hace. Ya se abrieron otras Lavanderías del Papa Francisco en Roma, en 2017, y en Génova, en 2019. Además, la Limosnería Apostólica ya instaló en 2015 unas duchas y barbería bajo la columnata de Bernini. Generaron mucha polémica, pero el Papa las mantiene hasta hoy pese a las críticas.

«Cuando ayudamos a los más pobres y vulnerables somos verdaderamente cristianos porque ponemos el Evangelio en el centro», ha declarado Konrad Krajewski a los medios locales durante la inauguración de las dos nuevas lavanderías en Turín. «Esta iniciativa es para mí motivo de alegría porque supone una oportunidad más de estar cerca de la humanidad herida», ha añadido el purpurado polaco, quien considera estos locales «una forma de manifestar la presencia y la cercanía de Dios a los más pobres».

Por su parte, desde la Comunidad de Sant’Egidio en Turín han definido el proyecto como «una caricia del Papa que llega en un momento de gran dificultad». La parroquia escogida para albergarlo, San Giorgio Martire, así como la Casa de Amistad La Sosta, son dos «puntos de referencia para tantos pobres».

Esta iniciativa responde a la llamada de Francisco en su carta apostólica Misericordia et misera, donde señala que «querer estar cerca de Cristo requiere hacerse cercano a los hermanos, porque nada es más agradable al Padre que un signo concreto de misericordia». En este documento escrito en 2016, el Papa invita a «dar espacio a la imaginación de la misericordia para dar vida a muchas obras nuevas, fruto de la gracia».

Sufragado por empresas y la sociedad civil

Por su parte, la rama italiana de la multinacional P&G, quien sufraga la iniciativa, ha mostrado su deseo de que estos servicios «puedan ayudar a muchas personas con dificultades a mejorar sus condiciones de vida». Riccardo Calvi, director de Comunicación de esta gran empresa, ha contado que su donación forma parte de un programa de responsabilidad corporativa con el que pretenden «aportar cambios positivos y concretos para las personas y el medio ambiente». Se han propuesto que «en las comunidades en las que operamos, nadie se quede atrás».

Ha opinado igual Karim Bruneo, director de Comunicación de Haier Europa, el otro gran mecenas del proyecto, quien ha reivindicado que «todo el mundo tiene derecho a llevar ropa limpia y a lavar su ropa de forma segura e higiénica».