Día de Caridad: Cáritas Madrid duplica sus ayudas durante el confinamiento
Cáritas Diocesana de Madrid ha duplicado durante el tiempo de confinamiento las ayudas económicas entregadas a las familias afectadas por la crisis. Con motivo del Día de Caridad que se celebra en la fiesta del Corpus Christi, llama a «aunar esfuerzos para salir juntos de esta situación»
Este domingo, Día de Caridad, es uno de los más importantes del calendario anual de Cáritas Diocesana de Madrid, que celebra especialmente en las parroquias y lugares de culto, y también en la calle, con una jornada especial en la que 3.000 voluntarios se hacen presentes en 550 mesas informativas y de donación ofreciendo información sobre su actividad.
Por primera vez en su historia, debido al Estado de alarma, Cáritas no podrá festejar en la calle este día, «pero las limitaciones por la crisis sanitaria no nos restan ilusión y ganas, menos aún en el contexto en el que lo celebramos este año, en medio de una pandemia que ha generado una emergencia sanitaria, social y económica sin precedentes de la que estamos siendo testigos directos en el acompañamiento de quienes más nos necesitan», afirma el comunicado hecho público este jueves por Cáritas Madrid.
En él, Cáritas presenta su Memoria Institucional de 2019, en la que informa de haber atendido a 104.851 personas, a través de una red territorial formada por 456 cáritas parroquiales, 21 obras sociales diocesanas, 409 proyectos y servicios y el compromiso de 9.317 voluntarios, «a los que habrá que sumar ahora las que se han ofrecido para colaborar con nosotros desde que comenzó el estado de alarma», dice Cáritas.
Durante el año pasado, Cáritas Madrid atendió a una media mensual de 5.600 personas a través de su red de acogida y asistencia, una cifra que en estos momentos supera las 10.000 atenciones al mes, de las cuales el 56 % son personas que nunca habían acudido a Cáritas en busca de apoyo.
En cuanto a las ayudas económicas, si el pasado la media era de 1.417 ayudas al mes, en los últimos 30 días se han alcanzado las 2.833. «Son ayudas a las que habría que sumar los menús preparados para las familias y los alimentos entregados, y otras atenciones que hemos desarrollado en esta crisis como el seguimiento y la escucha telefónica o la acogida de emergencia en diferentes recursos habitacionales de Cáritas Diocesana de Madrid», dice la nota.
Con todo ello, Cáritas Diocesana de Madrid quiere seguir ofreciendo «una respuesta a la demanda de ayuda para necesidades básicas, como la alimentación o la vivienda, acrecentadas en esta crisis», pero reconoce haber entrado «en una fase de acompañamiento individualizado con las familias para analizar las causas que les han llevado a una situación de necesidad y así tratar de iniciar con ellas itinerarios de acompañamiento e intervención desde diversas áreas, como el empleo y la vivienda, para su recuperación lo antes posible».
De hecho, Cáritas advierte que la mayoría de las personas que han acudido a la organización en las últimas semanas «son personas que antes de la irrupción del coronavirus no habían acudido nunca a Cáritas, y eso nos lleva a la necesidad de profundizar en sus necesidades más estructurales para facilitarles las herramientas necesarias para su recuperación».
Para seguir llevando a cabo toda esta labor, y dado que este año las huchas del Día de Caridad no podrán salir a la calle, Cáritas ha pedido la colaboración y solidaridad de todos a través de varias vías de donación disponibles en la web de donativos de Cáritas Diocesana de Madrid.
Convenio con el Ayuntamiento
El comunicado de Cáritas se ha hecho público en el mismo día en el que el Ayuntamiento de Madrid ha anunciado la renovación de un convenio con Cáritas para la realización de un servicio de atención a familias vulnerables en recursos residenciales dirigido a 64 familias con hijos, carentes de recursos personales y económicos suficientes para su integración social. El servicio, impulsado por el Ayuntamiento y gestionado por Cáritas Diocesana, tiene como objetivo favorecer la recuperación de las familias, en su mayoría monoparentales, a través de un alojamiento transitorio con apoyo social.
Durante el año pasado, este recurso atendió a 20 familias monoparentales con 46 hijos menores, en el inicio del proceso de intervención; y a 39 familias con 81 menores en la fase final del tratamiento social de los usuarios. Además, hubo otros alojamientos de breve estancia que atendieron a 11 familias, en su mayoría monoparentales, y 24 menores de 10 años.