Cuarto sacerdote asesinado en Nigeria: los mismos que en todo el año pasado

Uno de los dos sacerdotes católicos secuestrados el pasado viernes por hombres armados en el estado de Kaduna fue asesinado a tiros por sus secuestradores, según ha informado la Iglesia nigeriana. «Con un profundo sentimiento de tristeza y dolor, informamos del espantoso asesinato del sacerdote John Mark Cheitnum», confirmó el martes la diócesis católica de Kafanchan según recoge Europa Press.

Su cuerpo se descubrió el martes, ya en estado de descomposición, informó la diócesis. Pero fue asesinado a tiros el viernes, el mismo día en el que ambos clérigos fueron secuestrados a punta de pistola en una aldea de Yadin Garu (también en Kaduna, en el norte del país), tras haber viajado hasta allí para asistir a un acto eclesiástico. Se trata de un «espantoso asesinato», denunció la diócesis.

Donatus Cleophas, secuestrado junto con él, «ha escapado de sus secuestradores y se ha reunido con nosotros». Según ha declarado a la cadena británica BBC el jefe del estado de Kaduna de la Asociación Cristiana de Nigeria, el reverendo John Joseph Hayab, el clérigo ha sido liberado después de que se pagara un rescate por él. El pago, menor de lo exigido originalmente, también hizo que los captores informaran de dónde podía encontrarse el cuerpo de Cheitnum.

Docena de clérigos secuestrados

En su comunicado, la diócesis pedía oraciones por la víctima y su familia. Asimismo, exhortaba a que nadie «tome la justicia por su mano». Desde mayo, 18 clérigos cristianos —la mayoría católicos— han sido secuestrados por hombres armados en toda Nigeria. Tres sacerdotes católicos han sido asesinados por sus captores: Joseph Aketeh Bako, secuestrado el 8 de marzo y cuyo cuerpo aún no se ha recuperado; Vitus Borogo, el 25 de junio, y Christopher Odia, un día después.

Con la muerte de Cheitnum, el número de presbíteros asesinados en el país ya iguala a los cuatro de 2021. La inseguridad en Nigeria, anteriormente centrada en el noreste del país, se ha extendido en los últimos meses a otras zonas del norte y el noroeste, haciendo saltar las alarmas por la posible expansión de estas redes terroristas y criminales.

Además, según recuerda Il sismografo, estas cuatro víctimas suponen una tercera parte de los doce agentes de pastoral muertos violentamente en los primeros seis meses y medio de 2022. Le sigue México, donde han sido asesinados este año tres sacerdotes: José Guadalupe Rivas, secuestrado el 15 de mayo y cuyo cadáver se encontró el 18 de mayo; y los jesuitas Javier Campos Morales y Joaquín César Mora Salazar, tiroteados el 20 de junio. Los otros países en los que han sido asesinados agentes de pastoral son la República Democrática del Congo, Tanzania, Honduras, Bolivia, Haití y Vietnam.