Éste es el texto del telegrama que dirigió Benedicto XVI a Su Majestad el Rey Juan Carlos I, después de tomar el avión de regreso a Roma, tras concluir su tercer viaje apostólico internacional:
A Su Majestad Juan Carlos I, Rey de España:
Terminada mi grata permanencia en España para asistir al significativo Encuentro Mundial de las Familias, en Valencia, deseo manifestar mi más profundo reconocimiento a Sus Majestades, así como a las autoridades y a todo el querido pueblo español por la cariñosa hospitalidad que me han dispensado y por tantas muestras de cercanía y afecto que me han expresado en todo momento.
Confío en que, con ayuda del Todopoderoso, esa noble nación prosiga por los caminos de la prosperidad y la paz, en consonancia con sus más nobles tradiciones y raíces cristianas que han caracterizado a sus hijos durante siglos. Con esta esperanza les imparto de corazón la bendición apostólica.