COMECE: «No hay competencia a nivel de la UE para regular el aborto»

COMECE: «No hay competencia a nivel de la UE para regular el aborto»

Los obispos de la UE recuerdan que reconocer la dignidad del ser humano en todas sus etapas está ligado a la «genuina tradición humanística que hace de Europa lo que es»

María Martínez López
Macron en el Parlamento Europeo
Macron presentó su propuesta al Parlamento Europeo al comenzar la presidencia francesa, el 19 de enero de 2022. Foto: Unión Europa.

«No existe un derecho reconocido al aborto en el derecho europeo ni en el internacional», recordó la Comisión de Conferencias Episcopales de la UE (COMECE). De hecho, introducir semejante «derecho fundamental» en la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea «iría contra los principios generales del derecho de la Unión», afirmó Anton Jamnik, presidente de la Comisión de Ética.

El pasado martes, este departamento publicó un comunicado que detallaba que esta propuesta es éticamente indefendible. «Los Estados miembros de la UE tienen tradiciones constitucionales muy distintas en lo que respecta a la regulación legal del aborto», afirmó Jamnik. Imponer una forma determinada desde Bruselas sería una injerencia indebida en su soberanía. «No hay una competencia a nivel de la UE para regular el aborto», sentencia el texto.

Además, «el Tribunal Europeo de Derechos Humanos nunca ha declarado que el aborto sea un derecho humano protegido por la Convención Europea de Derechos Humanos». Al contrario, ha reconocido que proteger la vida del no nacido es «un objetivo legítimo» de los Estados. Cuando este derecho colisiona con los de la mujer, el Tribunal reconoce a cada país un amplio margen de maniobra.

Procedimiento complejo

En la declaración, se lee que «el respeto a la dignidad de cada ser humano en cada etapa de su vida, especialmente en situaciones de completa vulnerabilidad, es un principio fundamental en una sociedad democrática». Más aún, los padres fundadores de la Unión eran «muy conscientes» de la «inalienable dignidad del ser humano». Se basaban para ello «en la genuina tradición humanística que hace de Europa lo que es».

Por último, la Comisión de Ética subraya que cambiar la Carta de Derechos Fundamentales de la UE «requeriría un procedimiento muy complejo». Haría falta, por ejemplo, celebrar una convención con representantes de todos los Parlamentos nacionales y los jefes de Estado y de Gobierno. Y el resultado final tendría que ratificarse por unanimidad.

COMECE ha respondido en varias ocasiones al debate sobre la posibilidad de incluir el derecho al aborto en la Carta de Derechos Fundamentales de la UE, planteada por primera vez en 2022 por el presidente francés, Emmanuel Macron. En julio de ese año, después de que una resolución de la Eurocámara se pronunciara en el mismo sentido, COMECE pidió a los líderes políticos que trabajaran «para una mayor unidad entre los europeos, no para crear barreras ideológicas más altas».