China intenta re-educar a toda una diócesis - Alfa y Omega

China intenta re-educar a toda una diócesis

María Martínez López

El régimen comunista chino está poniendo todos los medios para evitar que se extienda el ejemplo de monseñor Tadeo Ma Daqin, el obispo auxiliar de Shanghai que, en su ordenación el pasado julio, anunció que abandonaba la Asociación Patriótica —la Iglesia oficial que controla el régimen—. Durante el mes de septiembre, todos los sacerdotes y religiosas de Shanghai (unas 160 personas en total) han sido obligados a someterse a un curso de de re-educación. Durante tres días, tuvieron que escuchar doce horas diarias de lecciones sobre las relaciones Iglesia-Estado, el sistema de valores comunista, la visión del Partido sobre religión —que incluye la idea de una Iglesia independiente del Papa—, las políticas y leyes al respecto, y el desarrollo económico de China. Las sesiones de adoctrinamiento tuvieron lugar en el Instituto del Socialismo de Shanghai

Las clases, en las que estaban presentes funcionarios municipales y de distrito, transcurrieron con tranquilidad. Uno de los sacerdotes obligado a asistir explicó a la agencia UCANews que tuvieron que hacer un examen y escribir, al finalizar el curso, un texto sobre lo aprendido, que influirá en sus futuros destinos. «Pensé que los oficiales del Gobierno criticarían abiertamente la ordenación» de monseñor Daqin —añadió—, «pero no lo hicieron. Sin embargo, se entiende que estas supuestas sesiones de estudio eran para contrarrestar» el efecto de su acto de fidelidad al Papa.

Desde su ordenación, monseñor Daqin se encuentra en arresto domiciliario en el Seminario de la diócesis, en Sheshan. No puede ejercer su ministerio, aunque sí sigue escribiendo —sin aludir expresamente a su situación— en su blog, a través del cual los fieles le expresan su apoyo.

Los cursos de reeducación no han sido la única represalia de las autoridades chinas. Los seminarios mayor y menor de la diócesis no han abierto aún para el nuevo curso, y la superiora de las Hermanas de Nuestra Señora de la Presentación ha sido obligada a abandonar su cargo. Además de para aislar al obispo, la agencia católica AsiaNews apunta que estas medidas pretenden castigar a seminaristas y religiosas, por intentar evitar que a la ordenación de monseñor Daqin asistieran obispos ilegítimamente ordenados. El 8 de noviembre comienza el congreso nacional de Partido Comunista, y se espera que hasta entonces las autoridades intenten mantener la situación bajo un férreo control.