Bolaños repite en Roma los objetivos del Gobierno: Valle de los Caídos e indemnizaciones para víctimas de abusos

Félix Bolaños, ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, ha viajado hasta Roma para acudir en representación del Gobierno español a la canonización de los mártires de Damasco. Estos franciscanos, asesinados en Siria a finales del siglo XIX, procedían de Burgos, Madrid, Murcia, Córdoba Valencia y Orense.

El ministro ha recalado en Roma apenas una semana después de la audiencia del presidente Pedro Sánchez con el Papa Francisco y su mensaje ha sido el mismo. Lo desarrolló este sábado en la Embajada de España ante la Santa Sede durante la recepción ofrecida por la embajadora, Isabel Celaá, con motivo de las canonizaciones.

A través de una nota de Moncloa, que recoge la agencia EFE, se explica que Bolaños expresó su confianza en que «se podrán alcanzar consensos sobre cuestiones de actualidad, como la aplicación de las recomendaciones contenidas en el informe del Defensor del Pueblo sobre las víctimas de abusos en el seno de la Iglesia católica o el cumplimiento de la Ley de Memoria Democrática para la resignificación del Valle de Cuelgamuros».

El ministro destacaba en la sede de plaza de España que, desde el Gobierno español, hay «la más absoluta predisposición a llegar a un acuerdo con la Iglesia para resolver estas dos cuestiones continuando con una tradición de máximo entendimiento y lealtad». También ponía de relieve «la amplia vocación de diálogo con la Iglesia» para resolver ambos asuntos en los que hay varios puntos de fricción entre las partes.

El Gobierno, a través de su ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, ha dejado claro que quiere que los frailes benedictinos se vayan del Valle de los Caídos porque «debe ser un centro laico que sirva para explicar la guerra y lo que vino después».

En cuanto a la cuestión de las víctimas de abusos, el Ejecutivo está presionando para que se pongan en práctica las sugerencias del informe del Defensor del Pueblo, como la de celebrar un acto público de reconocimiento y reparación simbólica a las víctimas —la archidiócesis de Madrid lo hará este próximo lunes en la catedral de la Almudena—, o la creación de un fondo estatal para el pago de indemnizaciones gestionado por la Administración pública que cifre la cuantía de las compensaciones.