Benigni le cuenta al Papa «la historia del mejor amigo de Jesús» 

El Papa León XIV se reunió el jueves en el Vaticano con el actor y director italiano Roberto Benigni, autor de la película La vida es bella, que el Pontífice ha mencionado como una de sus cuatro producciones favoritas. 

En su encuentro conversaron sobre cine y vieron fragmentos de un nuevo monólogo de Benigni dedicado a san Pedro llamado Pietro, un uomo nel vento. Durante el encuentro, el Pontífice vio algunos extractos de la obra y, al finalizar, comentó: «Qué hermoso, habla de amor».  

Antes de la proyección, León XIV y el actor conversaron precisamente sobre la conocida película de Benigni y también sobre ¡Qué bello es vivir!, la entrañable cinta de Frank Capra que también es una de las favoritas del Papa León. También departieron sobre la vida de san Pedro, Dante y san Agustín, así como sobre obras como la Divina comedia y las Confesiones.  

Un viento irresistible 

Pietro, un uomo nel vento será transmitido por RAI1 el próximo 10 de diciembre en prime time. «Después de leer el Evangelio, uno mira a las personas de otra manera», reflexiona Benigni en su monólogo de dos horas, que ha sido grabado estos días en los mismos jardines vaticanos. El texto cuenta como los demás «son cofres de tesoros, depósitos de inmenso valor». Así es la historia de Pedro, «el mejor amigo de Jesús» según Benigni, que desde Cafarnaúm hasta Roma está impregnada de «un viento irresistible: el viento del Amor con A mayúscula». 

Benigni ya fue recibido hace ahora tres años por el Papa Francisco a cuenta del estreno de otra obra sobre otro santo, esta vez san Francisco de Asís. Unos meses antes, narraron la vida de Jesús también a través de RAI1, detallando los encuentros que tuvo el Maestro durante su vida terrenal con el publicano Mateo, con el apóstol Judas o con María Magdalena. 

Este nuevo encuentro con Benigni en el Vaticano se produce tres semanas después de que León XIV recibiera en el Vaticano a numerosas estrellas del cine, entre ellas Cate Blanchett, Monica Bellucci y Viggo Mortensen, en una audiencia organizada en pleno Jubileo para «explorar las opciones que la creatividad artística ofrece a la Iglesia para promover los valores humanos», según afirmó entonces el Dicasterio para la Cultura y la Educación.