«Considerando las controversias que ha provocado la publicación del libro Desde lo más profundo de nuestros corazones, se decide que el autor del libro será para futuras publicaciones: “Cardenal Sarah, con la contribución de Benedicto XVI”. Sin embargo, el texto completo permanece sin cambios». Con esta breve comunicación publicada en Twitter el cardenal Robert Sarah, prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la disciplina de los Sacramentos ha puesto punto y final a la polémica en torno al libro en defensa del celibato sacerdotal.
La decisión del cardenal guineano llega como respuesta a una petición del Papa emérito. Según informaba este martes la agencia alemana Kathpress, a primera hora del día monseñor Georg Gänswein, secretario personal de Benedicto, llamó en su nombre a Sarah y le pidió que hiciera las gestiones oportunas con la editorial para quitar su nombre y su foto de la portada del libro. También debía dejar de constar como coautor de la introducción y la conclusión de la obra. Gänswein aseguraba a la agencia, al mismo tiempo, que la contribución que lleva su nombre en la parte central del libro es «100 % Benedicto».
Comunicado del cardenal guineano
El prefecto de la Congregación para el Culto Divino, el cardenal Robert Sarah, publicó la mañana del martes un comunicado en el que contestaba a las críticas por la publicación del libro, relatando los pasos que se fueron dando para gestar el volumen, que verá la luz este 15 de enero en Francia.
El comunicado se remite al 5 de septiembre, día en que el cardenal guineano preguntó al Papa emérito «si era posible escribir un texto sobre el sacerdocio católico, con especial atención a lo concerniente al celibato». Sarah aseguró al Papa que podría pensar «que unas reflexiones por su parte podrían no ser oportunas debido a la polémica que puede provocar en los medios de comunicación, pero estoy convencido de que la Iglesia lo necesita».
El 20 de septiembre, el Papa emérito envió una misiva al cardenal especificando que sus fuerzas no le permitían «la redacción de un texto teológico», pero que su petición le había animado a volver a retomar su trabajo sobre el sacerdocio. La carta de Benedicto XVI añade que la nota escrita «que siento fuertemente que es insuficiente», quizá «pueda ser de utilidad».
El 12 de octubre, durante el Sínodo del Amazonas, Benedicto remitió a Sarah un largo texto. «Inmediatamente propuse al Papa emérito la aparición de un libro que hará mucho bien a la Iglesia, integrando su texto con el mío», asegura Sarah en el comunicado. El 19 de noviembre envió a Benedicto XVI un manuscrito completo, «como lo habíamos decidido de común acuerdo. La portada, una introducción y unas conclusiones en común, el texto de Benedicto XVI, y el mío».
El 25 de noviembre el Papa emérito «expresó su gran satisfacción» y añadió «sentirse agradecido por las modificaciones» y que «el texto podía ser publicado de la forma que usted tenía prevista».
El 3 de diciembre, Sarah fue al monasterio a agradecer al Papa su confianza. «Le expliqué que nuestro libro sería imprimido durante las vacaciones de Navidad para publicarse el 15 de enero».
Concluye Sarah que la polémica suscitada por la información de que Benedicto XVI no estaba informado de la aparición del libro es «profundamente abyecta». «Perdono sinceramente a todos los que me han calumniado y quieren ponerme en contra del Papa Francisco. Mi unión a Benedicto XVI sigue intacta y mi obediencia filial a Francisco es absoluta».
La «operación editorial y mediática»
Tras la anticipación del diario francés Le Figaro del libro titulado Desde lo profundo de nuestros corazones firmado por Benedicto XVI y el prefecto de la Congregación para el Culto Divino, una fuente muy cercana a Benedicto XVI aseguró este lunes a la Cadena COPE que «Benedicto XVI no escribió un libro a cuatro manos con Sarah. Nunca vio ni autorizó la tapa», por lo que «es evidente que hay una operación editorial y mediática, de la que Benedicto se distancia y se manifiesta totalmente ajeno», según se hace eco la corresponsal de la Cadena COPE en el Vaticano, Eva Fernández.
Según esta misma fuente, «hace algunos meses el Papa emérito estaba escribiendo unos apuntes sobre el sacerdocio, que el cardenal Sarah le pidió ver y el Papa emérito puso el texto a su disposición, sabiendo que él estaba escribiendo un libro sobre el sacerdocio». A la espera de que el Vaticano añada alguna información sobre la veracidad de esta fuente, lo que sí ha subrayado el director editorial Andrea Tornielli es que el texto de 175 páginas aborda uno de los temas sobre los que el Papa Francisco se ha expresado en múltiples ocasiones: su firme oposición a abolir el celibato, llegando incluso a hacer suya una frase de Pablo VI: «Prefiero dar mi vida a cambiar las leyes del celibato».
En el texto aparecen dos artículos, uno de Benedicto XVI y otro del cardenal Sarah, junto a una introducción y una conclusión firmada por los dos. En él se reivindica el celibato sacerdotal frente a la resolución aprobada en el Sínodo de la Amazonía en la que se invitaba al Papa Francisco a reflexionar sobre la posibilidad de abrir nuevos caminos a la ordenación de hombres casados.
El director editorial de la Santa Sede, Andrea Tornielli ha recordado en Vaticans News que Benedicto XVI, que cumplirá 93 años el próximo mes de abril, fue precisamente quien facilitó la incorporación de sacerdotes casados en la Iglesia latina en 2009 con la constitución apostólica que crea los ordinariatos para sacerdotes y fieles anglicanos que desean sumarse a la Iglesia católica manteniendo su rito y su tradición.