Alpha online: «En un mundo diferente hay que hacer una evangelización diferente»
Alpha España se renueva y adapta su método de evangelización al mundo surgido tras la pandemia. «No podemos esperar a volver a la Iglesia de antes», afirman sus responsables
En Cuenca funciona desde hace años un grupo que reúne a jóvenes de cuatro parroquias de la ciudad para hacer campamentos. Este año han visto muy limitada su actividad y le han estado dando vueltas a cómo fomentar la fe y hacer piña entre ellos. El resultado es un curso de Alpha España que se ha realizado de manera online y que ha desbordado todas sus expectativas.
«Se han apuntado 90 jóvenes y se han incorporado amigos y conocidos a los que en otras ocasiones no hemos podido llegar», afirma Carlos, uno de los responsables del grupo. «Nos hemos llevado una gran sorpresa, porque ha sido una auténtica renovación y un aire nuevo para todos nosotros, sobre todo en lo que concierne a conocer de verdad al Espíritu Santo», añade.
Carlos cuenta que en los diez días del curso «todos esperábamos que llegara el jueves por la noche para conectarnos», y así «hemos podido compartir y hablar en un ambiente muy distendido y con confianza».
La de estos jóvenes de Cuenca es solo una de las experiencias que está llevando a cabo Alpha adaptadas a este tiempo de pandemia. Pero hay muchas más, como la de un grupo de Santiago de Compostela que creó la iniciativa Alpha Delivery, por la que en el día de la reunión cada persona recibía en su casa una bolsa con algo de cena para compartir en medio de la conexión.
«La pandemia supuso un parón para nosotros pero enseguida tuvimos claro que no vamos a volver a la misma Iglesia que había antes. Por eso no podíamos esperar a tener tiempos normales para volver a evangelizar. En un mundo diferente hay que hacer una evangelización diferente», afirma Emma de León, del equipo de Alpha España. «En este tiempo de tanto sufrimiento y soledad llevar el Evangelio a los demás es más necesario que nunca», asegura.
Emma parte de la base de que «al Espíritu Santo le da igual que Alpha sea presencial o sea online, porque Él va a actuar siempre. El Señor sigue trabajando en este mundo tal y como está. Para Él no hay distancia ni impedimentos, solo nos pide abandono y confianza».
El formato digital que ha cobrado esta herramienta de evangelización continúa con las diez sesiones sobre diferentes temas básicos de nuestra fe, una charla previa y luego tiempo para compartir. «Estamos manteniendo la acogida y las reuniones en grupos pequeños, tal como nos permite la tecnología. Y al final la gente se queda con ganas de más, como siempre», atestigua.
Las reacciones en general son «sorprendentes» porque «está viniendo mucha gente y los cursos están siendo muy numerosos. Había muchos que antes nunca habían podido ir a un Alpha presencial y ahora lo van a poder hacer a distancia. Hay menos impedimentos ya que la gente se siente segura al estar en casa. Es algo muy bonito porque en realidad estamos llevando el evangelio al corazón de su hogar».