Los jesuitas apartan a uno de sus sacerdotes, acusado de abusos

La Compañía de Jesús ha apartado provisionalmente de su puesto a uno de sus sacerdotes, que ha sido acusado de abusos a un menor; unos hechos que, según ha reconocido la congregación en un comunicado, habrían ocurrido en la primera década de este siglo en Alicante y en Zaragoza.

La compañía tuvo conocimiento de lo ocurrido en julio de 2025 a través de su canal interno de denuncias. A partir de ahí, se abrió una investigación que en septiembre de 2025 pudo recabar un testimonio verosímil.

Tras la verificación, los jesuitas pusieron el caso en manos de la fiscalía para que se pueda determinar si los hechos están prescritos o no en la jurisdicción civil. En el supuesto de que el delito siguiera activo, la Compañía de Jesús «confía en el trabajo de la justicia para esclarecer la verdad» y se pone a disposición del ministerio público para colaborar «en todo lo que se le requiera». No obstante, «recordamos que, en el ámbito del derecho canónico, los delitos de abusos no prescriben en los mismos términos que en la jurisdicción civil, por lo que el procedimiento canónico podría continuar aunque la vía penal no tuviera recorrido».

Cargo en la CEE

Además de avisar a la justicia, los jesuitas informaron a la Conferencia Episcopal Española, pues el sacerdote ejercía en la actualidad un cargo dependiente de la CEE. El acusado fue entonces apartado de dicho puesto y de todas sus responsabilidades hasta que se clarifique la situación.

«Actualmente permanece en una comunidad de la compañía, sin relación ni actividad pastoral y sujeto a medidas cautelares de limitación y supervisión», reza la nota publicada este martes 4 de octubre por la Compañía de Jesús, que también habla del «derecho a la presunción de inocencia».

Recogida de testimonios

A las acciones ya realizadas, los jesuitas dicen estar poniendo todos los medios a su alcance para esclarecer los hechos: «Continúa la recogida de testimonios —a través del email proteccion@jesuitas.es— que pudieran confirmar, aclarar o añadir información relevante sobre este u otros hipotéticos casos». Asimismo, manifiestan su «disposición a colaborar en todo lo que sea necesario con las autoridades judiciales y eclesiásticas. Nuestro compromiso es escuchar, acoger y acompañar a quienes puedan haberse visto afectados».

Por último, la Compañía de Jesús concluye su comunicado expresando el «profundo dolor que situaciones como estas nos causan al pensar en las víctimas de abusos, y nuestro deseo de saber responder con justicia y con verdad». El compromiso de todos los centros de la Compañía por crear entornos seguros es «inequívoco y en esto llevamos años trabajando, con medidas para la prevención, formación, sensibilización y detección de cualquier tipo de abuso o conducta inapropiada que pueda producirse en nuestras obras».