Vicente Martín en los Premios de OMP: «La misión forma parte de nuestro ser creyente»

Los misioneros «nos recuerdan a todos que la misión forma parte de nuestro ser creyente, de nuestro ser cristiano». Lo ha afirmado este viernes el obispo auxiliar de Madrid Vicente Martín en los Premios de OMP (Obras Misionales Pontificias). La entidad los entrega en vísperas de la Jornada Mundial de las Misiones (Domund), que se celebra este domingo.

«Lo llevamos en nuestro ADN por nuestro propio Bautismo. Gracias por recordárnoslo», ha dicho a los presentes. En esta línea, ha añadido que «no tenemos una misión. Somos una misión» para «bendecir, vivificar, anunciar, dar vida».

Martín ha señalado la relevancia del lema de este año del Domund, Misioneros de esperanza entre los pueblos, en un contexto «en el que tanta falta le hace» por «conflictos, guerras, desigualdades e incertidumbres». En este «mundo del desasosiego», ha asegurado que «somos portadores de la buena noticia del Evangelio».

Así, se ha preguntado «cómo tenemos que reavivar la propia esperanza para abrir caminos de esperanza en nuestro mundo». Ha reconocido que «no siempre seremos capaces, ni siquiera a veces sabremos cómo anunciar y transmitir la belleza del Evangelio». Sin embargo, ha subrayado que «hay algo que nunca puede faltar: el amor, la opción por los últimos, por los que más sufren».

En nombre del arzobispo de Madrid, cardenal José Cobo, Vicente Martín en los Premios de OMP ha transmitido un «saludo muy cordial». También su agradecimiento por «esa labor que hacéis y ese servicio que prestáis», ya sea Kike Figaredo —prefecto apostólico de Battambang, en Camboya—, «en primera línea»; o José María Calderón, director nacional de OMP.

De igual modo, Martín ha agradecido a Dios que haya «tantas personas que se entregan en el día a día». «Dios nos gana siempre en generosidad», ha reconocido. «Pero necesita corazones generosos».

Experta en úlcera de Buruli

El Premio Beata Paulina Jaricot, que distingue a misioneros que hayan destacado por su entrega, se le ha entregado a Julia Aguiar, hermana franciscana misionera de la Madre del Divino Pastor, misionera en Benín y médico. Su trabajo en el centro de salud Gbémontin ha sido esencial para diagnosticar y curar la úlcera de Buruli.

«El mismo año en el que llegamos a Benín (1976), llegó una niña con una herida en el brazo y la espalda. Era algo desconocido», ha recordado la hermana Julia. «Le dijimos a su abuela que se fueran al hospital universitario, pero ella no quiso moverse de allí, así que empezamos a hacer lo que nos pareció lo mejor».

Tras esa niña, fueron llegando más personas con la misma dolencia, y las hermanas les iban tratando con cirugía y antibióticos, y documentando todos los casos. Pronto dos investigadores de Bélgica y Estados Unidos se interesaron por ese trabajo.

A pesar de haber ganado reconocimientos como el doctorado honoris causa por la Universidad de Nápoles, Aguiar se alegra simplemente por «haber sido útil» y «aliviar el sufrimiento». «Dentro de tu pobreza, de tu ignorancia… todo es poder compartir la vida con las personas con las que te encuentras».

«La vida del misionero vale la pena», ha afirmado. Ya desde niña supo que Dios le llamaba a dejarlo todo e ir a África a entregar su vida, y así lo ha hecho en sus casi 50 años en Benín. «Tratamos de llevar el amor que Dios tiene a todas las criaturas, especialmente a los más pobres».

Misión y teología

«La perspectiva de la misión ilumina toda la teología, penetra el quehacer de la Iglesia», ha subrayado durante su intervención Eloy Bueno, experto en misionología y catedrático de la Facultad de Teología del Norte de España, con sede en Burgos. Esta labor le ha hecho merecedor del Premio Beato Paolo Manna con el que OMP distingue a personas o instituciones que se hayan comprometido en España en la sensibilización misionera y su apoyo a los misioneros desde la retaguardia.

Sin embargo, el matiz ad gentes no siempre está suficientemente subrayado. «Si todo cristiano tiene que mirar a la realidad con la mirada de Dios, esta es universal. Por ello, no puede haber un cristiano que no tenga esa visión de “hasta los confines de la tierra” en todo lo que hace: rezar el rosario, la Eucaristía…»./p>

En este sentido, Bueno ha definido a los misioneros como «mensaje cristiano hecho biografía». Ellos «encarnan el Evangelio» y por ello su testimonio contagia.

En el acto ha participado también el sacerdote vietnamita Anh Nhue, secretario general de la Pontificia Unión Misional. «Ustedes pueden ver en mí el fruto de los misioneros», ha afirmado. Ha agradecido a los obispos españoles la estrecha colaboración con las misiones, y a todos los españoles el cariño y generosidad con los misioneros. «Espero que el Domund de este domingo sea un momento jubilar para todos», ha concluido.