Los padres entonan el mea culpa: «Tres de cada cinco aseguran sentirse responsables del bullying que ejercen sus hijos»
El V Estudio sobre la percepción del bullying en la sociedad española, presentado por Totto y Educar es Todo, habla de la importancia de educar en la empatía y el respeto en casa como forma de prevenir el acoso escolar
El 24,7 % de los niños de 5 a 18 años, casi uno de cada cuatro menores, declaran haber sufrido acoso escolar, lo que supone un aumento de más de un punto porcentual respecto al año pasado. Así lo refleja el V Estudio sobre la percepción del ‘bullying’ en la sociedad española, que cuenta con la opinión de 1.732 menores, padres y docentes, presentado el pasado miércoles por la empresa Totto y la comunidad Educar es Todo.
«Los datos son demoledores». Es como «para plantearse qué estamos haciendo como sociedad para que tantos niños vayan al colegio con miedo», apunta María Dotor, responsable de Contenidos y Comunicación de Educar es Todo, la mayor comunidad –tal y como se definen– de madres, padres y expertos en crianza y educación respetuosa.
«Digo “como sociedad” porque a veces da la impresión de que este tema, como ocurre en un sitio muy concreto –la escuela–, solo tiene que darse solución desde ahí». Pero el bullying, según Dotor, «no es un problema escolar, es un problema social en el que tenemos que trabajar todos».
Para la responsable de Contenidos, un primer paso sería «hablar más del bullying», porque «de lo que no se habla no existe». De hecho, «gracias a que cada vez se le da más visibilidad a este problema», con estudios como el de Totto y Educar es Todo, «los chavales son capaces no solo de identificar lo que les ocurre, sino de verbalizarlo». Desde esta perspectiva también se explica el aumento del número de alumnos que reconoce haber sufrido este acoso.
Además de con el acosado, desde Educar es Todo subrayan la importancia de trabajar también con el acosador y con los espectadores silenciosos. «Si un acosador no se ve respaldado por el resto, dejará de acosar», asevera María Dotor. Para lograrlo es imprescindible «la educación emocional, desarrollando en nuestros hijos y alumnos la empatía desde que son pequeñitos». La experta, sin embargo, es consciente de que todavía queda mucho trabajo por delante. «El estudio nos da datos preocupantes en este sentido, y es que casi el 50 % de los niños que declaran haber presenciado un episodio de bullying, también declara que prefirió no meterse y mantenerse al margen».
Otro dato preocupante es el de los padres que se sienten responsables del acoso ejercido por sus hijos. «Son tres de cada cinco encuestados», una cifra «que nos ha impactado» y que «invita al cambio». En este sentido, María Dotor recuerda que «educación en casa es la base». Y añade: «Nuestros hijos aprenden por imitación. Somos el espejo en el que se miran». Por eso «es tan importante importante que en casa haya un clima de confianza, comunicación. Que se respiren valores como la tolerancia, el respeto, el compañerismo».
Más que intentar cambiar el comportamiento de nuestros hijos, concluye la responsable, «la clave está en cambiar el nuestros, que será al final el que ellos copien».