Caritas Internationalis sobre Gaza: «No actuar ahora abrirá la puerta a futuras atrocidades»
La organización ha suscrito un llamamiento junto a otras 150 ONG, también judías, para que se ponga fin a la violencia contra los civiles
Con motivo de la conferencia internacional organizada en París por el Gobierno francés para abordar la crisis que atraviesa el Líbano (no solo a causa de los ataques israelíes contra Hizbulá en su territorio), Caritas Internationalis ha suscrito junto a 150 organizaciones más un llamamiento para pedir a los Estados miembro de la ONU que pongan fin a la violencia que afecta a los civiles en Gaza, Cisjordania y el Líbano.
Estas organizaciones son confesionales y no confesionales y, entre ellas, destaca la presencia de alguna judía. Alertan en su comunicado de que, sin asunción de responsabilidades ni rendición de cuentas, «no habrá líneas rojas y nunca se tocará fondo». Lamentan la destrucción a la que se enfrenta toda la región y que cada vez es mayor. Por eso, aseguran en su llamamiento conjunto que «no actuar ahora es una elección que abrirá la puerta a futuras atrocidades».
A mediados de octubre la Comisión Internacional Independiente de Investigación de la ONU sobre los Territorios Palestinos Ocupados, incluida Jerusalén Oriental, e Israel concluyó en un informe que Israel ha cometido «crímenes de guerra y de lesa humanidad de exterminio con ataques deliberados contra el personal y las instalaciones médicas en Gaza». El informe pide a los Estados miembro «que dejen de ayudar o asistir en la comisión de violaciones».
El comunicado de estas organizaciones, al que se ha adherido Caritas Internationalis, menciona este informe. También recuerda que no se han implementado ninguna de las cuatro resoluciones sobre Gaza del Consejo de Seguridad de la ONU ni las órdenes de la Corte Penal Internacional.
Así, concluyen que «el flagrante desprecio de la comunidad internacional por el derecho internacional y la impunidad del Gobierno de Israel en Gaza, Cisjordania y ahora el Líbano han sentado nuevos y peligrosos precedentes en el desarrollo de la guerra».
El conflicto sigue abierto con un nuevo intercambio de ataques hace pocas horas. Israel ha bombardeado Siria e Irán en respuesta al ataque iraní del 1 de octubre. Teherán ya ha invocado su derecho a la autodefensa tras estos bombardeos.
Las organizaciones que suscriben el llamamiento insisten a los Estados miembro de la ONU en que hacer todo lo que esté a su alcance para poner fin a esta catástrofe «no es solo un imperativo moral, sino también una obligación jurídica». Los invitan a poner en marcha investigaciones internacionales sobre los crímenes de guerra cometidos por ambas partes y les reiteran que es necesaria la liberación de los rehenes y la protección a los civiles. También piden a estos Estados que no contribuyan a rearmar a los contendientes.
1.000 millones de dólares
La conferencia de donantes en Francia ha conseguido 1.000 millones de dólares para el país de los cedros. El dinero se destinará a ayuda humanitaria y también militar para el Ejército libanés, tal y como explicó el ministro francés de Exteriores, Jean-Noël Barrot.
La conferencia ha congregado en París a ministros y diplomáticos de 70 países y a representantes de 15 organizaciones. La Unión Europea sostiene que fortalecer al Ejército libanés y mantener la presencia de las tropas de la ONU, la misión UNIFIL para el mantenimiento de la paz, es la mejor barrera de contención para las actividades de Hizbulá contra Israel. La campaña militar de Netanyahu contra esta organización en suelo libanés ha dejado un saldo de más de 2.500 muertos y más de un 1,2 millones del desplazados, de los que casi la mitad son menores.