Ante las protestas en Venezuela, los obispos advierten a Maduro que debe respetar el derecho de manifestación
Para este sábado, la oposición venezolana ha convocado marchas en todo el mundo contra el fraude electoral
«Los obispos reiteran su llamamiento a las autoridades a garantizar el respeto del ejercicio de los derechos ciudadanos consagrados en la constitución nacional como son la libertad de expresión y la manifestación pacífica de las propias posiciones políticas». Con este escueto mensaje en redes sociales, la Conferencia Episcopal Venezolana recuerda al gobierno de Nicolás Maduro que la ley de leyes consagra también el respeto a la expresión de ideas políticas contrarias a su régimen.
Para este sábado, la oposición venezolana ha convocado a los venezolanos en todo el mundo para que se lancen a las calles y exijan las actas electorales que reflejarán los verdaderos resultados de los comicios del 28 de julio.
«Invitamos a todos los venezolanos a promover una convivencia social sana y pacífica», instan los obispos venezolanos en su mensaje.
María Corina Machado y Edmundo González viven escondidos desde hace más de una semana por temor a represalias del gobierno de Maduro que ya ha adoptado la retórica del complot internacional contra su régimen. El vicepresidente venezolano, Diosdado Cabello, en su programa nocturno semanal, ha alertado a los venezolanos de «nuevos planes violentos orquestados por la extrema derecha para el próximo sábado».
El 11 de agosto, Machado convocaba a los venezolanos a través de un vídeo en el que invitaba a «gritar juntos para que el mundo apoye nuestra victoria y reconozca la verdad y la soberanía popular».
Los resultados electorales ya provocaron protestas que, según distintas organizaciones, se han saldado con al menos 24 muertos y más de dos mil detenciones. González Urrutia ha llamado a Maduro a poner fin a la «violencia y persecución». «Exigir respeto a nuestra constitución no es un delito, manifestarse pacíficamente para apoyar la voluntad de millones de venezolanos no es un delito», recordaba el exdiplomático.