Activistas animalistas irrumpen en la audiencia del Papa
Pertenecen a la conocida organización PETA que pide a Francisco que condene la tauromaquia
A los pocos minutos de comenzar la audiencia general de este miércoles en el Aula Pablo VI, dos mujeres han irrumpido a voz en grito con carteles que rezaban, «la corrida (de toros) es pecado». Vestían además unas camisetas en las que podía leerse: «Basta de bendecir las corridas».
No habían pasado ni dos minutos del principio encuentro del Papa con los peregrinos, cuando las dos activistas saltaron a uno de los pasillos del Aula Nervi mientras se leía el Evangelio de san Lucas. El alboroto ha durado pocos segundos, pero ha sido notorio. Las mujeres han sido inmediatamente desalojadas por la Guardia suiza y los miembros de la Gendarmería Vaticana.
La asociación animalista PETA mantiene desde hace tiempo una campaña para pedir al Papa su intervención condenando la tauromaquia. Desean que la Iglesia rompa con la tradición de relacionar las fiestas en honor de los santos patronos con corridas de toros o con cualquier tipo de espectáculo taurino.
«PETA pide a su Santidad que condene la vil industria taurina y rompa los vínculos de la Iglesia con estos espectáculos sangrientos y despiadados», indican en su petición.
La organización esgrime, por ejemplo, que el punto 2418 del Catecismo señala que «es contrario a la dignidad humana hacer sufrir inútilmente a los animales y sacrificar sin necesidad sus vidas». O que el propio Francisco, en la Encíclica Laudato Si’, escribe que «todo acto de crueldad hacia cualquier criatura es contrario a la dignidad humana».