¿Quién está detrás de Aute, la plataforma evangelizadora para jóvenes?
A través de las redes sociales, una marca de ropa, eventos y una aplicación móvil, quieren transmitir el mensaje de Cristo «con un lenguaje actualizado»
«Como un milagro». Así define Luis Fenoll lo que es Aute, una iniciativa que nació en septiembre de 2021 y que pretende ser un vínculo entre los jóvenes y la Iglesia. Él es el responsable de medios de comunicación y, en conversación con Alfa y Omega, explica que todo comenzó con los videos que el influencer católico Quique Mira subía a su perfil de Instagram. «Sin saber muy bien cómo llevarlo a cabo, hizo un llamado por las redes sociales para crear un grupo de apóstoles jóvenes y la gente respondió».
Testigos de cómo otros jóvenes estaban «desorientados, con preguntas y sufriendo una falta de autenticidad y verdad en sus vidas», decidieron hacer un equipo para trabajar en un proyecto más grande con esta misma visión: «compartir el mensaje de Cristo a los jóvenes para que conozcan la Verdad y quieran seguirla».
De esa manera se creó esta asociación sin ánimo de lucro, que está sostenida con el trabajo voluntario de alrededor de 50 personas y que quiere ser una respuesta «para ese joven que se encuentra perdido y que no ha encontrado a Dios, pero también para los insatisfechos por la sociedad», asegura Fenoll. «Queremos hablar de Cristo en el lenguaje joven».
En Aute todos los beneficios se reinvierten en la propia asociación y en las tres personas que trabajan a tiempo completo para «profesionalizar el mensaje». Porque, además, otro de los objetivos de este grupo es romper esa barrera de prejuicios que tiene mucha gente de que «en la Iglesia somos raros». Por eso, desde Aute, focalizan esfuerzos en tener unas redes sociales cuidadas con mensajes claros.
«Creemos que hoy en día hay una falta de amor verdadero», asegura Fenoll, que también es el responsable de internacionalización y confirma que se encuentran en un proceso de expansión por algunos países de Latinoamérica. «Nos quieren vender la idea de que no hay nadie mejor que nosotros. Se piensa mucho en lo individual y en el ombliguismo», y hace alusión a la necesidad de romper con ese «individualismo excesivo» para proponer el amor y el servicio a los demás.
«Aute no es un movimiento sino una herramienta»
Luis Fenoll es claro: «A la Iglesia le hace falta ser pescadora y salir a la calle», y asegura que cada vez es más necesario «actualizar la manera de llegar al joven sin cambiar el mensaje de Jesucristo». En ese sentido, Aute pretende ser ese nexo a través de las redes sociales y con un contenido audiovisual disruptivo «que toque el corazón».
Sin embargo, quieren dejar claro que Aute no es un movimiento eclesial sino una herramienta que puede hacer que un joven acabe involucrándose en una parroquia o identificándose con el carisma de un movimiento concreto. De hecho, Fenoll cuenta que dentro de la asociación hay personas que pertenecen a diferentes sensibilidades y carismas eclesiales y que cada una de ellas ha tenido un encuentro personal con Dios.
«Nuestro papel no es convencer ni obligar a nadie. Dios sale tocar el corazón de cada uno», afirma. Y asegura que mucha gente les contacta después de ver sus contenidos diciéndoles que «nuestros mensajes les generan preguntas».
Propuestas concretas
Además de los eventos que organizan, dentro de las propuestas concretas de Aute se puede encontrar una marca de ropa, que además acaba de presentar su segunda colección. Prendas con un estilo joven y a la moda, pero con un mensaje católico. En la etiqueta de cada una de ellas hay un código QR que lleva a un video con un mensaje concreto «que lleva a la reflexión».
Por otro lado, también han puesto en marcha la aplicación móvil WayUpp con el objetivo de poner en contacto a los jóvenes con realidades eclesiales concretas según la ubicación en la que se encuentren. De esa manera, se facilita el encuentro con parroquias, grupos, retiros espirituales o movimientos.