Los envenenamientos llegan a los colegios de Afganistán que los talibanes no cerraron
82 niñas fueron intoxicadas el pasado fin de semana en el norte del país. Entre 2009 y 2018, se produjeron varios incidentes similares en el país, con hasta 600 víctimas en pocos días
La Unión Europea denunció el pasado martes el crimen «atroz» contra 77 niñas afganas que resultaron intoxicadas el fin de semana en dos escuelas de la provincia de Sar e Pol, en el norte de Afganistán. Podría tratarse de un nuevo caso de envenenamiento, como ya se ha producido en este país en los últimos años; un modelo que más recientemente se ha trasladado a Irán.
«Se trata de un crimen atroz del que las autoridades de facto deben hacer un seguimiento», indicó en alusión a los talibanes un comunicado de la diplomacia de la UE que recoge Europa Press. «Proteger a la población» es una obligación «que les impone el Derecho internacional». En este sentido, el bloque comunitario recordó que la educación es un derecho humano. «Las escuelas deben ser lugares seguros para todos los niños».
A comienzos de semana, las autoridades afganas informaron de que cerca de un centenar de personas, entre ellas al menos 82 niñas, habían resultado intoxicadas durante el fin de semana en dos colegios del norte del país, informa EFE. Se trataba de colegios de primaria, y por tanto no afectados por la prohibición de que las chicas acudan a los centros de secundaria.
Por un lado, 56 alumnas de primaria fueron envenenadas el pasado sábado, junto con tres profesores, dos conserjes y un padre en una escuela del distrito de Sangcharak. Al día siguiente, 26 más y cuatro profesores corrieron la misma suerte en otro centro cercano.
«Resentimiento personal»
Mohammad Rahmani, jefe del Departamento de Educación de la provincia, afirmó a CNN que «después de llegar a la escuela por la mañana, las estudiantes de repente empezaron a sentirse mareadas y a tener dolor de cabeza y náuseas. Fueron atendidas en un hospital local, salvo 14 de ellas que presentaban síntomas más graves y fueron derivadas a otro centro en la capital de la provincia.
Un médico de este hospital, que deseaba permanecer en el anonimato, explicó a la cadena estadounidense de que los síntomas apuntaban a un envenenamiento. Según declararon las autoridades a Associated Press, se cree que «personas desconocidas rociaron veneno en las aulas». Creen que pudo ser una acción orquestada por alguna persona con «un resentimiento personal».
El parecido con las intoxicaciones que llevan sufriendo desde noviembre cientos de alumnas de centros educativos de Irán ha llevado a informar erróneamente de que puede tratarse de un contagio de esta práctica. En todo caso, sería más bien al contrario. En Afganistán, entre 2009 y 2018 se produjeron varios incidentes similares, con hasta 600 víctimas en pocos días.
Sí es la primera vez que un ataque de este tipo ocurre desde la llegada al poder de los talibanes en agosto de 2021. Desde entonces han impuesto medidas draconianas contra las mujeres, como la prohibición de cursar estudios de secundaria y universitarios, y de trabajar en la mayor parte de sectores, incluidas las ONG. Esto llevó a varias entidades a paralizar su trabajo durante algunas semanas en diciembre pasado. Lo retomaron después de que las autoridades les garantizaran que podían trabajar en el sector sanitario.