Ruralitas. Qué vida descansada - Alfa y Omega

Ruralitas. Qué vida descansada

Isidro Catela
Samuel, diseñador de moda, vive en Rubielos Altos (Cuenca) y protagoniza el capítulo de Ruralitas emitido el pasado 21 de mayo. Foto: RTVE.

Comienza la oda a la vida retirada de fray Luis de León ensalzando la descansada vida que huye del mundanal ruido y sigue la escondida senda, por donde han ido los pocos sabios que en el mundo han sido. Esto es exactamente lo que hace Ruralitas, una de esas joyas escondidas en La 2 de TVE que presumen de ser para una inmensa minoría. Dirigido por Bárbara Esteban, Ruralitas ausculta las constantes vitales del mundo rural, mayoritariamente inserto en eso que hemos dado en llamar la España vaciada. Y lo hace con una puesta en escena cuidada, a favor de obra, elogiando una vida a contracorriente, por contraste al vértigo que nos arrastra a cuantos vivimos en la urbe. Cada episodio va de la mano de los ojos de un personaje que nos va mostrando quehaceres y tareas de lo más variadas, algunos tan peculiares como el caso de Maider, presentado en uno de los últimos programas. Maider es luchadora, medallista olímpica en Londres 2012 y pastora apasionada por la producción del queso en la localidad alavesa de Olaeta.

Como suele suceder en estos casos, el horario de emisión es mejorable. Ruralitas se emite semanalmente, todos los domingos a las ocho y cuarto de la tarde. Ya saben que siempre nos quedará la opción de verlo a la carta en rtve.es/play.

Un programa de viajes (aunque no en el formato típico al que estamos acostumbrados), que es, sobre todo, un canto a la vida sencilla, añorada y alguna medida también idealizada, que tal vez sirva para que profesores y padres le enseñen a sus hijos y alumnos cómo era el pueblo de los abuelos. Si lo hace, habrá cumplido la humilde función de ser servicio público, que consiste también en hallar un programa como Ruralitas que, de no existir aquí en La 2, difícilmente lo podríamos encontrar en otro lugar.