Con 91 años cuida a su mujer enferma de alzhéimer: «El secreto es educación y respeto»
Gregorio Jaráiz recibe uno de los Premios Cinfa ¡Buenos días, Javi y Mar! entregados este jueves
«Esto es culpa de mis nietas», dice con humor al otro lado del teléfono Gregorio Jaráiz, que ha recibido este jueves en Madrid uno de los Premios Cinfa ¡Buenos días, Javi y Mar! que entrega este programa de Cadena 100.
A sus 91 años, Gregorio cuida día a día de su mujer, de 87, desde hace nueve, cuando a ella le diagnosticaron la enfermedad de alzhéimer. «Cuido de ella totalmente —señala—. Su salud es buena pero tiene la cabeza perdida no se sabe dónde. A veces no sabe ni cómo se llama, ni si tiene que comer o no. Tiene el cableado estropeado».
Eso hace que a veces no pueda reconocer ni siquiera al hombre con el que lleva compartiendo la vida casi 70 años, y eso «me sienta como un tiro», dice Gregorio, pero él sigue día a día «al pie del cañón», primero «porque me gusta, y eso une la devoción y la obligación», vuelve a decir con humor.
Gregorio tira a menudo de fuerzas «donde no las hay», reconoce; como hoy, «que he venido con tres kilos de compra y me visto negro para subir la escalera». Pero aun así, «sigo adelante», sabedor del testimonio de amor que está dando: «claro que soy consciente», dice.
Por eso, después de casi siete décadas, la última de ellas marcada por la enfermedad, Gregorio señala que su mensaje para la sociedad es «más educación y respeto», porque «hay muy poco de esto en el mundo entero. Más respeto unos a otros, eso es lo que hace falta. Y el que quiera comer de la cesta ajena, que deje la suya sin tapadera».
Para Enrique Ordieres, presidente de Cinfa, encargado de entregarle el premio, el testimonio de Gregorio «es una historia muy bonita, de valores que no están de moda: solidaridad, esfuerzo, compartir y vivir situaciones difíciles de manera conjunta».