Amparo Alonso: «Era necesario asegurar un clima de trabajo más sereno»
Hace 28 años, esta extremeña comenzó a dar sus primeros pasos como voluntaria en Cáritas Diocesana de Badajoz. Hoy es la encargada de guiar el proceso de reforma en Caritas Internationalis tras el cese de la cúpula del organismo
Hasta ahora era la directora de Incidencia y Campañas de Caritas Internationalis, labor que también desempeñó durante un tiempo en las oficinas de Cáritas Española. ¿Qué parte de esta experiencia profesional le ayudará en su nueva tarea?
Desde que empecé a trabajar con Cáritas sobre el terreno, hace 28 años, aprendí el papel fundamental que desarrolla la institución acompañando a las personas más olvidadas, en cada rincón del planeta. En el corazón de nuestro trabajo por la justicia social y el desarrollo integral siempre están las personas, las más vulnerables; no hay números ni estadísticas, hay personas. Trabajamos con ellas y, detrás de cada una, hay una historia de vida que merece ser respetada, una dignidad que merece ser siempre, y, ante todo, reconocida. Cada persona es protagonista de su desarrollo, y Cáritas escucha, acoge, promociona, impulsa y responde. Este es el centro que siempre ha movido mi trabajo, en cualquiera de las tareas que he desempeñado, sea desde la economía social, sea en la cooperación internacional, o sea en mi trabajo desde la incidencia política mundial. Por otra parte, el conocimiento de toda esta confederación, que reúne a 162 Cáritas nacionales, será muy importante en mi rol de apoyo al nuevo comisario extraordinario.
¿Cómo recibió su nombramiento al frente del proceso de reforma de Caritas Internationalis?
Con mucho agradecimiento por la confianza que ha depositado en mí el Santo Padre, y con mucho compromiso, responsabilidad, humildad, y entrega a esta tarea encomendada para los próximos seis meses.
¿Cómo define el trabajo que tiene que hacer ahora? ¿Cuáles serán sus competencias?
Mi tarea es apoyar al comisario extraordinario, Pier Francesco Pinelli —nombrado por el Papa el pasado 22 de noviembre—, en estos seis meses de mandato para realizar la revisión de los procedimientos internos necesarios para mejorar nuestro trabajo al servicio de una confederación mundial. La idea es prepararnos bien para la próxima Asamblea General de Caritas Internationalis, y acompañar a todo el personal, al que conozco bien y del que me siento muy orgullosa de formar parte, ya que he trabajado durante varios años con la Secretaría General primero desde Ginebra, como directora de la Oficina para Naciones Unidas, y, desde 2020, desde Roma.
Una ley del Estado de la Ciudad del Vaticano y un motu proprio del Papa Francisco dieron el pasado martes un paso más en la reforma de la Curia. El cambio busca regular los organismos nacidos dentro de los distintos dicasterios, para aplicarles los principios de la constitución apostólica Praedicate Evangelium. Se dispone que su patrimonio esté sujeto también al control de los órganos económicos de la Curia, y no solo al de las instituciones de las que dependen.
¿Qué tipo de elementos o pruebas desencadenaron la investigación del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral?
Después de escuchar con atención a todos los empleados, se vio que era necesario asegurar un clima de trabajo más sereno para fomentar la coordinación interna y el sentido de eficacia y satisfacción derivado de hacer el propio trabajo. El principio de atención a la persona y la atención a la salvaguarda de la misión propia de la organización guiaron los trabajos de la comisión de evaluación del dicasterio. Confiamos en que la renovación del Secretariado de Caritas Internationalis aporte también vigor e impulso al trabajo de cada una de las Cáritas miembro.
Según el comunicado de prensa del Vaticano, la auditoría reveló «deficiencias en los procedimientos de gestión, que también tuvieron un efecto negativo en el espíritu de equipo y la moral del personal». ¿Hubo abuso de poder? ¿Cuál fue la causa principal?
La evaluación realizada en Caritas Internationalis se ha basado precisamente en la escucha atenta y participativa de todos los trabajadores. Esta puesta en común ha permitido observar el funcionamiento de la estructura, en sus trayectorias y objetivos, y así captar tanto lo que ha resultado positivo, funcional y operativo en el cumplimiento de su misión como lo que con el tiempo ha producido tropiezos y necesidades de mejora.
El cardenal Tagle dijo que no había ningún caso de abuso sexual o una mala gestión financiera ¿Por qué el Papa decidió destituir a toda la cúpula de la organización solo unos meses antes de la Asamblea General en la que se celebrarán elecciones para renovar los cargos de gobierno?
En vistas a la próxima Asamblea General de Caritas Internationalis, la decisión de relevar de sus respectivos cargos a todas las figuras llamadas a dirigir y coordinar el trabajo de la organización nace del deseo de favorecer un reinicio común, que pase de la necesaria revisión del actual marco normativo —como señaló el Santo Padre— a avanzar según caminos y métodos renovados, pensados también para volver a trabajar con entusiasmo y confianza.