El movimiento provida valora la nueva ley del aborto: «Es como poner un pirómano junto a los bomberos»

«Es necesario que todos los centros sanitarios públicos con servicio de ginecología y obstetricia cuenten con profesionales que garanticen la interrupción voluntaria del embarazo»: así ha adelantado la ministra de Igualdad Irene Montero este miércoles el anteproyecto de la ley del aborto que prepara su departamento.

La ministra ha puesto en el foco a los profesionales sanitarios al afirmar que la ley «respetará el derecho a la objeción de conciencia pero lo haremos escrupulosamente compatible con el derecho de las mujeres a decidir sobre sus propios cuerpos. La objeción de conciencia es un derecho pero no puede ser un impedimento para los derechos de las mujeres», añadió la ministra.

En este sentido, Montero indicó como referente la regulación del derecho a la objeción de conciencia que ya recoge la ley de eutanasia y que tanta polémica está suscitando entre los profesionales sanitarios.

Para Montero, es preciso «que cuando una mujer decida abortar pueda acudir a su centro de salud y recibir información sobre su derecho», una medida que irá acompañada de una línea telefónica oficial de información para las mujeres en este ámbito.

Un acto que «violenta la conciencia» del médico

Para Alicia Latorre, presidenta de la Federación Española de Asociaciones Provida, la nueva ley anunciada por la ministra de Igualdad responde «a una obsesión compulsiva porque las mujeres aborten y por combatir todo lo que pueda hacerles siquiera plantearse no hacerlo. No solo hay un desprecio hacia ese hijo que va a morir destrozado, sino que se favorece que la mujer tome una decisión irreversible en un momento de gran confusión y a menudo angustiada por su situación».

Asimismo, sobre la obligatoriedad de que en todos los centros sanitarios de la red pública haya profesionales que deban realizar abortos «es como si se obligara a que en cada unidad de bomberos hubiera un pirómano. El aborto no es un acto médico y, por tanto, quien ha estudiado para curar, aliviar y paliar las enfermedades no puede prestarse a realizar este acto inicuo que violenta su ciencia y su conciencia».

Sí a la Vida 2022

El anuncio de la nueva ley del aborto coincide con la convocatoria, tras dos años sin pisar la calle por la pandemia, de una nueva concentración de la plataforma Sí a la Vida. Será el próximo 27 de marzo a las 12:00 horas en Madrid, desde la calle de Serrano con Goya hasta la plaza de Cibeles, donde habrá un acto con testimonios, música y un manifiesto final.

Para Alicia Latorre, de trata de «un acto público y unitario por la defensa de la vida y su dignidad», lo que significa «alzar la voz para denunciar la injusticia y vergüenza tanto de las leyes más recientes que atentan contra la vida –eutanasia, persecución a los provida que rezan ante las clínicas–, como las anteriores que han arrebatado millones de vidas humanas».

Como alternativa, «queremos mostrar la cara preciosa e intensa de la vida humana con aspectos positivos, testimonios de lucha, superación y generosidad, que casi nunca se muestran y están dándose cada día».