Vicente Ribas Prats: «La sociedad no es más moderna sin religión» - Alfa y Omega

Vicente Ribas Prats: «La sociedad no es más moderna sin religión»

Después de casi dos años al frente de la diócesis de Ibiza como administrador, el sacerdote ibicenco se convertirá este sábado en su nuevo obispo

Fran Otero
El nuevo obispo ha desarrollado toda su labor pastoral en Ibiza
El nuevo obispo ha desarrollado toda su labor pastoral en Ibiza. Foto: Diócesis de Ibiza.

El pasado 12 de octubre cumplió 25 años como sacerdote. Y al día siguiente se hizo público su nombramiento. ¿Fue un regalo?
¡Menudo regalo! Fue, por una parte, un nuevo servicio que me pedía la Iglesia. Porque la vida de los sacerdotes es, ante todo, servicio. Y lo recibí como un gesto de confianza del Papa, que ha creído oportuno que un ibicenco sea el pastor de la Iglesia de Ibiza y Formentera.

¿Parte con ventaja al haber sido administrador diocesano 22 meses?
Es una ventaja, pues el camino está marcado, tanto en el quehacer de lo cotidiano como de lo extraordinario. Y otra gran ventaja es conocer a los sacerdotes, religiosos, religiosas y seglares que forman parte de esta diócesis y que ellos me conozcan. Creo que podemos trabajar más al unísono, con más confianza.

¿Tiene algún ideal de obispo?
No tengo ningún ideal de obispo. Es más, no existe ningún obispo ideal. Si me preguntas cuál es el ideal de los obispos, la respuesta no puede ser otra que Jesucristo, el Buen Pastor. Me viene a la memoria un fragmento de la novela Las sandalias del pescador, cuando en los entresijos del cónclave, un cardenal le dice a otro que lo que hace falta —referido al Papa que tenía que ser elegido— es que fuera un santo. Y el otro le contesta: «Un santo no. Un hombre para los demás hombres y de los hombres. Un hombre que pueda sangrar por ellos, y amonestarlos, y hacerles saber siempre que los ama. Un hombre que pueda romper el cerco de este jardín dorado y convertirse en otro Pedro». Aquello que M. West pedía al Papa de su novela es válido para todo obispo.

¿Cuál va a ser su prioridad?
La participación en el Sínodo de los Obispos. Es más, la fase diocesana deseo que sirva también como si de un sínodo propio se tratase. Tenemos una gran oportunidad.

¿Qué significa para Ibiza y Formentera tener un obispo de la tierra?
Ha sido un motivo de gran alegría. Algo que se ha puesto en valor estos días es que, al ser ibicenco, la lengua, las costumbres y las peculiaridades de los pueblos me son conocidas. Ello contribuye a crear un ambiente más familiar.

¿Qué dificultades vive socialmente la población?
La pandemia supuso un durísimo golpe para la economía de las islas, que prácticamente dependen del turismo y los servicios. Esto afectó a muchísimas personas, residentes o que vienen a trabajar los meses de verano. Esta situación motivó un crecimiento de la atención sociocaritativa y de la conciencia social ante las carencias de muchas personas con rostro y nombre. Los donativos que ha recibido Cáritas han hecho que nadie se haya quedado desatendido.

En las últimas semanas se han producido ataques a la asignatura de Religión por sindicatos en la región. ¿Qué tiene que decir?
Los ataques contra la enseñanza religiosa escolar son un ataque contra la libertad religiosa. Los problemas no se solucionan con descalificaciones. Una sociedad no es más moderna, ni más progresista, ni más humanista, si borra la religión católica y sus valores del sistema educativo. Quizá, en el fondo, está la cuestión de que la Religión, con otras materias, propician el crecimiento autónomo y libre del pensamiento y, por tanto, a no perder el sentido crítico y a mantener la conciencia despierta. Esto no interesa a un modelo sociopolítico manipulador.

Bio
  • Nació en Sant Antoni de Portmany (Ibiza) el 12 de mayo de 1968
  • Fue ordenado sacerdote el 12 de octubre de 1996
  • En el año 2010 fue nombrado vicario general de la diócesis
  • El 4 de febrero de 2020 fue elegido administrador diocesano de Ibiza
  • El Papa lo designó obispo de Ibiza el 13 de octubre de 2021