«La Iglesia está llamada a anunciar la buena noticia a partir de las periferias»
El Papa va a dedicar las próximas catequesis a san José porque su figura «puede servirnos de apoyo, consuelo y guía» en un «tiempo marcado por una crisis global»
El Papa ha comenzado un nuevo ciclo de catequesis en las audiencias generales de los miércoles. San José es el tema sobre el que Francisco reflexionará en las próximas semanas porque su figura «puede servirnos de apoyo, consuelo y guía» en un «tiempo marcado por una crisis global con diferentes componentes».
El Pontífice ha comenzado profundizando en su nombre, que en hebreo significa «Dios aumenta, Dios hace crecer», y que revela un aspecto esencial de la personalidad de José de Nazaret: «Es un hombre lleno de fe en Dios, en su providencia. Cree en la providencia de Dios».
El Santo Padre también ha querido resaltar el lugar de procedencia de san José, Nazaret, y donde nació Jesús, Belén. Ambos nos dicen «que la periferia y la marginalidad son favorecidas por Dios», hasta el punto de que «Jesús nace en una periferia».
Ante esta realidad, el Papa ha advertido que «no tomar en serio esta realidad equivale a no tomar en serio el Evangelio y la obra de Dios, que sigue manifestándose en las periferias geográficas». Y en las existenciales, porque «Jesús va en busca de los pecadores, entra en sus casas, les habla, llama a la conversión.
Asimismo, «Jesús va a buscar a los que no hicieron el mal, sino que lo padecieron: los enfermos, los hambrientos, los pobres, los más pequeños». En este sentido, san José, que es un carpintero de Nazaret y «confía en el plan de Dios para su joven prometida y para él mismo, recuerda a la Iglesia que debe fijar su mirada en lo que el mundo ignora deliberadamente».
El santo patriarca «nos recuerda que debemos dar importancia a lo que otros descartan» y que «lo realmente valioso no llama nuestra atención, sino que requiere un paciente discernimiento para ser descubierto y valorado».
Pidámosle que interceda, ha concluido Francisco, «para que toda la Iglesia», que «está llamada a anunciar la buena noticia a partir de las periferias», «recupere esta perspicacia, esta capacidad de discernir y evaluar lo esencial. Volvamos a empezar desde Belén, volvamos a empezar desde Nazaret».
Antes de marcharse, el Papa ha mandado un mensaje «a todos los hombres y mujeres que viven en las periferias geográficas más olvidadas del mundo o que viven en situaciones de marginalidad existencial: que encuentren en San José el testigo y el protector al que pueden mirar».
Oración por las víctimas de abusos
Tras haber pronunciado su catequesis, el Pontífice ha aprovechado el saludo a los fieles en las distintas lenguas para recordar la Jornada de Oración por las Víctimas y Supervivientes de Abusos que han convocado para este jueves 18 de noviembre los obispo de Italia. «Una oportunidad de reflexión, concienciación y oración para apoyar la recuperación humana y espiritual de las víctimas», dijo el Santo Padre.
Asimismo, el Papa ha subrayado que es deber ineludible de todos los que tienen alguna responsabilidad educativa en la familia, en la parroquia, en la escuela, en los lugares de recreo y deporte, «proteger y respetar a los adolescentes y jóvenes que se les confían, porque es precisamente en esos lugares donde se producen la mayoría de los abusos».