Piden a las parroquias instalar tiendas de campaña en el Tiempo de la Creación
El Papa Francisco ha anunciado en la Jornada Mundial por el Cuidado de la Creación que en breve publicará un mensaje ecuménico con el patriarca Bartolomé y el primado anglicano
«Junto con los hermanos de las distintas confesiones cristianas, recemos y trabajemos por nuestra casa común en estos tiempos de grave crisis planetaria». El Papa Francisco ha invitado este miércoles a unirse a la Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación, que se celebra cada 1 de septiembre. Con ella da comienzo el Tiempo de la Creación, que se prolonga hasta el 4 de octubre, memoria de san Francisco de Asís. El Santo Padre ha anunciado también que «en los próximos días» hará público un mensaje elaborado de forma conjunta con el patriarca ecuménico Bartolomé y con el primado anglicano Justin Welby.
Mientras tanto, las entidades cristianas que promueven el Tiempo de la Creación animan a todas las comunidades a sumarse simbólicamente a esta cita instalando «en el jardín de la iglesia o en un espacio verde» una tienda de campaña. Es la tienda de Abraham, que él y Sara abrieron a tres extraños en un acto de hospitalidad y «se convirtió en una fuente de bendición para toda la tierra».
Acogida, diálogo y sencillez
Este gesto recuerda que cuidar la creación es «un acto de hospitalidad radical» que busca dejar un lugar para todas las criaturas «en nuestra casa común, la casa (oikos) de Dios». Se explica así la relación con el lema de la jornada este año: ¿Una casa para todos? Renovando el ‘Oikos’ de Dios. La tienda es también «un símbolo de diálogo», muy necesario para la búsqueda de soluciones integrales e interdisciplinares a la crisis ambiental.
Como «lugar de resguardo o de refugio», apunta a «las personas sin hogar, refugiadas y desplazadas por los efectos del cambio climático». Asimismo, hoy en día la tienda se ve como un símbolo de sencillez, de vivir con lo esencial, «dentro de las propias posibilidades» y sin dejar una gran huella en el entorno. Por último, nos recuerda que «Jesús vino a morar en medio de su pueblo como un signo del amor de Dios». Este amor, que es «la raíz de nuestra fe», «nos impulsa a amar a nuestros semejantes cultivando y cuidando nuestro hogar común».
El Señor pide reparar su casa
Entre los primeros que han escuchado esta invitación están los jóvenes de la Asociación de Guías y Scouts Católicos Italianos. Colocaron la primera tienda en la plaza de Santa Clara, en Asís. Su presidenta, Barbara Battilana, ha explicado a Vatican News que muy cerca de allí «se custodio el crucifijo de San Damián», de quien san Francisco recibió la «petición del Señor de reparar su casa». Desde ese lugar, los grupos scouts italianos instalarán tiendas de campaña en otros lugares «y transmitirán el mensaje de cuidar nuestra casa común no como una empresa solitaria, sino comunitaria».
Los promotores del Tiempo de la Creación invitan, por ejemplo, a rezar en torno a estas tiendas «con y por quienes están en situación de vulnerabilidad», a llevar a ellas distintos elementos de la creación y a ponerlas en el centro de los actos que se organicen. Tanto ellos como Manos Unidas han editado sendas guías con guiones para celebraciones comunitarias y otras sugerencias para vivir este tiempo dedicado a promover la conversión ecológica.
El Consejo de Conferencias Episcopales de Europa (católico) y el Consejo Europeo de Iglesias (ecuménico), en un mensaje conjunto, invitan a los cristianos del continente a «contribuir con nuestras reflexiones y nuestra oración» a dos importantes cumbres organizadas en los próximos meses por la ONU: la Conferencia sobre Biodiversidad que se celebrará en octubre en Kunming (China), y la COP26 sobre el cambio climático, prevista para noviembre en Glasgow (Reino Unido).
En un mensaje conjunto hecho público la semana pasada, ambas instituciones explican que oikos hace referencia a lo «doméstico», que «es objeto del propio cuidado y representa un interés común así como una responsabilidad compartida». Renovar esta «casa de Dios» supone, por tanto, «unir a toda la familia humana en la búsqueda de un desarrollo integral, sostenible y compartido con equidad». Por ello, invitan a «generar experiencias humanas y espirituales» que promuevan la «conciencia de vivir todos, juntos y sin exclusión, en la casa de Dios».