Francisco pide sacar de la «marginalidad» la Misa de los domingos

El Papa ha reclamado nuevas «orientaciones pastorales litúrgicas» para las parroquias que logren hacer frente a la «marginalidad» hacia la que parece «caer inexorablemente» la Misa del domingo, al tiempo que ha lamentado la «triste experiencia de ayuno litúrgico» que vivieron los fieles durante el confinamiento por la pandemia.

«La asamblea dominical se encuentra así desequilibrada tanto por la presencia generacional y la desigualdad cultural, como por la dificultad de encontrar una integración armoniosa en la vida parroquial, para ser la verdadera cumbre de todas sus actividades y fuente de dinamismo misionero para llevar el Evangelio de la misericordia a las periferias geográficas y existenciales», ha señalado Francisco.

El Pontífice ha hecho estas declaraciones en un mensaje enviado al presidente del Centro de Acción Litúrgica (CAL), monseñor Claudio Maniago, con ocasión de la 71ª Semana Litúrgica Nacional, que comienza este 23 de agosto en la ciudad italiana de Cremona.

El texto, recogido por Europa Press, ha sido firmado por el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, y ha sido leído al inicio de los trabajos.

El Santo Padre también ha señalado que «en la vida real de las personas» ha cambiado la propia percepción del tiempo y, en consecuencia, «del propio domingo, del espacio», lo que ha tenido «repercusiones en la forma de ser y sentir la comunidad, las personas, la familia y de la relación con un territorio». De este modo, Francisco ha instado a que se recupere la «centralidad en la fe y en la espiritualidad» de la Misa.