El Regnum Christi renace como federación con un gobierno colegial
La Santa Sede ha constituido la Federación Regnum Christi y ha aprobado sus estatutos, que entrarán en vigor el 15 de septiembre. «Se consideró que era la forma jurídica que mejor podía responder hoy a lo que somos e impulsar la misión del Regnum Christi al servicio de los hombres», asegura Carlos Zancajo, director territorial de los Legionarios de Cristo en España
Una década después de que estallara el escándalo de Marcial Maciel, el fundador de los Legionarios de Cristo, el movimiento ha resurgido de sus cenizas y vive ahora un nuevo comienzo con la constitución por parte de la Santa Sede de la Federación Regnum Christi y la aprobación de sus estatutos.
Con este nuevo paso, toda la familia espiritual del Regnum Christi, integrada por los Legionarios de Cristo, las consagradas, los laicos consagrados y los laicos, queda compuesta jurídicamente dentro de la federación, que se regirá de forma colegial. «Se consideró que era la forma jurídica que mejor podía responder hoy a lo que somos e impulsar la misión del Regnum Christi al servicio de los hombres», asegura el sacerdote Carlos Zancajo, director territorial de los Legionarios de Cristo en España, a Alfa y Omega.
Para los directores generales de la federación, tal y como han explicado en una carta remitida a todos los miembros del movimiento, la luz verde del Vaticano supone «una confirmación del discernimiento que hemos hecho entre todos y de los estatutos como un instrumento válido para dar continuidad y una nueva proyección al plan de Dios sobre nuestra familia espiritual».
La nueva estructura está formada y gobernada colegiadamente por las cuatro vocaciones, lo que supone «probablemente la principal novedad», explica Emilio Martínez Albesa, director territorial de los laicos consagrados del Regnum Christi en España. «Es un estilo de gobierno distinto y eso requiere un aprendizaje por parte de todos», puntualiza Lourdes Santos, directora de las consagradas en nuestro país. «Necesitaremos comprensión, paciencia y ayudarnos a llevar adelante la novedad de algo grande y muy querido por todos».
15 de septiembre ad experimentum
Si bien es cierto que ya cuentan con el sello eclesiástico, los nuevos estatutos entrarán en vigor el 15 de septiembre. Hasta entonces, la federación se centrará en adaptarse a esta nueva forma de gobierno. Para ello «hemos creado una comisión preparatoria en cada territorio en el que estamos presentes», confirma Santos. Por otro lado, «se trata de seguir profundizando y desplegando nuestra misión y espiritualidad contenidas de alguna manera en nuestro nombre: Regnum Christi, tratando de hacer presente a Cristo, el Amor encarnado y redentor, en el mundo», añade Jorge Barco, laico que ha formado parte del órgano de gobierno durante todo el periodo de renovación.
Los nuevos estatutos arrancarán oficialmente en septiembre ad experimentum, lo que supone un tiempo para «verificar la adecuación de las normas y, en su caso, aportar necesarias modificaciones», señala en una carta el arzobispo José Rodríguez Carballo, secretario de la Congregación para Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica. De esta forma, si hiciera falta, la federación podrá pedir cambios a la Santa Sede a través de «la Convención General del Regnum Christi, en la que participan representantes de todas las vocaciones», aclara la también laica Carmen Fernández.
Destacado papel de los delegados pontificios
De especial relevancia en el camino de renovación ha sido el papel de los dos delegados pontificios que han acompañado al movimiento en estos años. Primero fue el cardenal Velasio de Paolis, quien antes de fallecer «nos fue guiando a través del túnel en que estábamos a consecuencia de la doble vida y las graves inmoralidades del padre Maciel, y de sus repercusiones en nuestra realidad», afirma Emilio Martínez Albesa. Él «nos ayudó a identificar quiénes éramos, y nos fue enseñando a gobernar y a ejercer la autoridad de forma más justa y madura, a purificar nuestras estructuras de los aspectos que los visitadores habían identificado que necesitaban revisarse al estar afectadas por la vida del fundador, por un lado, y por la propia juventud e inexperiencia de nuestra institución».
También «nos ayudó a distinguir con claridad las diferentes vocaciones dentro del Regnum Christi y la necesidad de que cada una de las vocaciones consagradas tuviese un gobierno propio. Al mismo tiempo, constatamos que todos somos Regnum Christi, que todos compartimos un carisma, espiritualidad y misión, y que eso necesitaba una estructura de comunión que nos ayudase a desplegarlo mejor».
El relevo del cardenal De Velasio quiso el Papa Francisco que lo asumiera Gianfranco Ghirlanda, SJ, quien «nos orientó para encontrar la forma canónica más adecuada», concluye el director territorial de los laicos consagrados del Regnum Christi en España.