El colegio malagueño al que el Papa felicitó por su 50º aniversario - Alfa y Omega

El colegio malagueño al que el Papa felicitó por su 50º aniversario

El centro diocesano de Málaga que lleva el nombre de su impulsor, el padre Jacobo, está inmerso en un proyecto de innovación y, además, colabora con Scholas Occurrentes

Encarni Llamas Fortes
El padre Jacobo, en el centro de la imagen con sotana, en una actividad del colegio. Foto: Colegio Padre Jacobo

«A la comunidad educativa del Padre Jacobo, que celebra un importante aniversario, les hago llegar mis saludos, mis mejores deseos y mi bendición. Que Dios los bendiga. Y por favor, no se olviden de rezar por mí». Estas palabras del Papa Francisco sorprendieron a la comunidad educativa del colegio diocesano Padre Jacobo, de la Fundación Victoria, el 7 de febrero, cuando su equipo de dirección presentaba un vídeo con motivo de su 50 aniversario, que llevan preparando con mucho cariño durante meses.

Junto al obispo de Málaga, monseñor Jesús Catalá, y otras personalidades de la política y el deporte malagueños como el alcalde, Francisco de la Torre; el presidente de la Fundación Victoria, José Sánchez Herrera; los actores Joaquín Núñez y Salva Reina; el jugador del Unicaja Alberto Díaz; el exfutbolista del Málaga CF Catanha; y la modelo Remedios Cervantes, el Papa Francisco envía sus mejores deseos a esta obra educativa, uno de los 30 centros de la Fundación diocesana de Enseñanza Santa María de la Victoria.

Educando en familia

«Si algo ha caracterizado al colegio Padre Jacobo en estos 50 años de vida y lo sigue haciendo en la actualidad es que educamos en familia. No entendemos el proceso educativo sin la participación activa de las familias, del AMPA, en nuestro día a día, algo de lo que estamos convencidos estaría orgulloso de ver don Jacobo Real (fundador del colegio)», afirma Miguel Cristóbal Rueda Román, director del colegio.

Actualmente, el colegio diocesano Padre Jacobo es un centro concertado bilingüe en el que estudian 372 alumnos de Educación Infantil, Primaria, Secundaria y Especial.

Miguel Cristóbal explica que «se cumplen 50 años desde que, en el curso 1966-1967, el sacerdote don Jacobo Real Romero, en un alarde más de su entrega al más necesitado y, concretamente, de su preocupación por la educación de los más pequeños, consiguiese inaugurar un centro escolar en la barriada de La Isla y bajo el nombre de Agrupación Escolar Mixta La Isla, siendo el primer director don Esteban García Mota. Años antes de la inauguración del centro escolar, don Jacobo, conocido por todos como padre Jacobo y párroco en aquel entonces de la parroquia del Santo Ángel, trabajó con ilusión y entusiasmo en el proyecto de construcción del colegio, tras la concesión por parte de don Enrique Van Dulken de unos terrenos entre su olivar. Múltiples donativos, aportaciones de los feligreses y no pocos sacrificios son los que tuvo que realizar el padre Jacobo hasta conseguir cumplir con su objetivo».

El actual director del centro educativo diocesano saluda al Papa Francisco en el Congreso Mundial de Scholas Ocurrentes. Foto: L’Ossevatore Romano

Hermanamiento entre alumnos

Uno de los muchos proyectos que se han puesto en marcha en este centro es el del hermanamiento entre alumnos para que los mayores se conviertan en referencia para los más pequeños. Es curioso que en el colegio Padre Jacobo todos los alumnos tienen hermanos, aunque sean hijos únicos. Cada escolar cuenta, durante todo el curso, con otro alumno de distinta edad (mínimo tres años de diferencia) que ejerce de hermano mayor o menor. Un programa de hermanamiento que participó en el cuarto congreso de la red mundial de escuelas que impulsa el Papa Francisco (Scholas Occurrentes), tras haber sido seleccionado entre 200.000 escuelas de todo el mundo. En ese momento se fraguó la idea de pedir al Papa un mensaje para la comunidad educativa que dos años después se ha materializado.

El director del Padre Jacobo señala que los más pequeños aprenden valores como la fraternidad, la amistad, el compañerismo…, y tienen un referente que les recibe con los brazos abiertos prácticamente desde el primer día y les hace más fácil su adaptación al colegio. Los mayores, por su parte, se abren más, desarrollan la capacidad de esforzarse, de querer servir de ejemplo y también mejoran su capacidad de expresión. «Cada gesto entre ellos, cada beso y cada mirada que intercambian es un signo más de la vida que se respira en Padre Jacobo, es nuestra manera de interpretar el verdadero amor de Dios y de sentir que formamos una familia cristiana unida», señala Miguel Rueda.

Ahora se encuentran inmersos en un proyecto de innovación educativa. «Es un proyecto de revista sobre el 50 aniversario, en el que estamos trabajando toda la comunidad educativa. En dicha revista fomentamos el comercio en el barrio, por lo que le vamos a dar publicidad a todos los pequeños comercios de la zona y los vamos a hacer partícipes para que colaboren con nosotros», explica Rueda.

«Han sido 50 años de un precioso y exigente trabajo llevado a cabo por muchos profesores, equipos directivos, personal no docente, pero sobre todo, 50 años de confianza de las familias de un barrio obrero en su colegio», concluye el director del centro.

Los actos de celebración comenzaron el pasado 7 de febrero, pero las citas continúan en las próximas semanas. El 11 de marzo hay prevista una jornada deportiva con múltiples competiciones individuales y por equipos, y una comida compartida por todos los miembros de la comunidad educativa. Y el 10 de junio tendrá lugar la fiesta del 50 aniversario, coincidiendo con el fin de curso.