El ciudadano ilustre - Alfa y Omega

El ciudadano ilustre

Juan Orellana
Escena de 'El ciudadano ilustre'
Foto: A Contracorriente Films.

Un premio Nobel de Literatura viaja a su pueblo natal en Argentina después de 40 años. La película de Gastón Duprat y Mariano Cohn es una radiografía precisa del prototipo de intelectual progresista posmoderno. Daniel Montovani (Óscar Martínez) vive de su imagen, estudiadamente desencantada, deliberadamente desvinculada de cualquier pertenencia que no sea él mismo. Es un narcisista, que huye del contacto con otros, excepto con las mujeres con las que hay posibilidad de sexo. Un auténtico cínico, muy pagado de sí mismo, y de una soberbia intelectual que le inhabilita para la empatía. Aun así, no puede evitar el impacto con la realidad, que le pone frente a seres humanos reales, con sus miserias y encantos, con sus contradicciones y limites, y que le demuestran, aunque no lo reconozca, que se ha situado en un trono de nube en el que no hay vida, no hay nada. Siempre le queda la coartada de un impostado relativismo, que declara con una frase rotunda: «La realidad no existe. No hay hechos, solo interpretaciones». Pero la película le desmiente, y nos muestra que la realidad existe y es testaruda.

El ciudadano ilustre
Director:

Mariano Cohn, Gastón Duprat

País:

Argentina

Año:

2016

Género:

Drama

Público:

+12 años

Cartel de 'El ciudadano ilustre'