Y Dios salió a la calle - Alfa y Omega

Y Dios salió a la calle

Redacción
Un momento de la Fiesta de la Misericordia, por las calles de Soria. Foto: Diócesis de Osma Soria

En el último tramo del Año de la Misericordia, la diócesis de Osma-Soria ha organizado la Fiesta de la Misericordia, tres días «para hacer llegar la misericordia de Dios a la calle, al día a día de los sorianos, y para decir que Dios no se cansa nunca de perdonar y que nosotros no debemos cansarnos de pedirle ese perdón», cuenta Ángel Hernández Ayllón, vicario de Pastoral de la diócesis oxomense.

Todo comenzó el miércoles 21 de septiembre, con la adoración al Santísimo en la parroquia de Santa María la Mayor. Al día siguiente, quienes pasaron por la céntrica plaza de San Esteban pudieron escuchar varios testimonios de personas que explicaron cómo habían experimentado la misericordia de Dios en su vida: un joven peregrino a la última JMJ de Cracovia, un expresidiario enfermo de cáncer, varias personas relacionadas con la pastoral diocesana…, e incluso varios espontáneos se animaron a hablar en público sobre el amor de Dios en sus vidas.

La fiesta concluyó el viernes con una peregrinación de cinco horas al atardecer por las calles centrales de la ciudad, abarrotadas a esas horas, portando el estandarte diocesano de la misericordia. En el recorrido se situaron algunos sacerdotes para confesar a quien quisiera. Algún vecino hubo que, al ver la peregrinación, se acercó y se confesó después de varias décadas sin hacerlo. «Ha sido un auténtico paso del Señor por Soria», asegura Rubén Tejedor, delegado de Medios de comunicación.