La Justicia devuelve la Religión al aula - Alfa y Omega

La Justicia devuelve la Religión al aula

Obispos y sindicatos de profesores han tenido que interponer recursos para que los gobiernos autonómicos respeten el estatus de la asignatura. Aragón, Andalucía, Asturias, Baleares o Extremadura son algunas de las regiones donde hay contenciosos abiertos

Fran Otero
La asignatura de Religión no es obligatoria, aunque los centros escolares tienen que ofertarla. Foto: REUTERS/Tony Gentile

Sabido es que la LOMCE mejoró algunos aspectos de la asignatura de Religión –la dotó de la alternativa que había eliminado la Loe–, aunque dejó algunas grietas que bastantes gobiernos autonómicos están intentando aprovechar para reducir las horas lectivas de esta materia al mínimo. Lagunas que ahora viene a solventar la Justicia, a la que han recurrido los obispos de cada diócesis y los sindicatos del profesorado.

El último caso se produjo en Aragón, donde hace justo una semana el Tribunal Superior de Justicia (TSJA) suspendió de manera cautelar la decisión del Gobierno regional de reducir el horario de la asignatura de 90 a 45 minutos semanales en todos los cursos y grupos tras el recurso de los obispos y del sindicato Apprece. Un nuevo varapalo de los tribunales al Gobierno regional, del PSOE, después del que sufrió en junio cuando la misma instancia le obligó a mantener la materia en el horario lectivo de Bachillerato, de donde la había sacado. Con estas últimas decisiones, la Religión mantiene las mismas horas lectivas. Tal es la contundencia de la decisión judicial que la Consejería de Educación ya ha emitido instrucciones para que los centros otorguen los 90 minutos correspondientes a la Religión, aunque recurrirán. «Vamos a hacer un seguimiento para ver si esas instrucciones se cumplen o no», explica a Alfa y Omega Bernardino Lumbreras, delegado de Enseñanza del Arzobispado de Zaragoza, que reconoce que la vía judicial era su «última opción» y que no les ha quedado más remedio que recurrir a ella.

El Gobierno regional nunca mostró voluntad de diálogo y, de hecho, reconoce abiertamente en las instrucciones que envía a los centros que su intención es reducir al máximo la enseñanza religiosa confesional en la escuela. Más aún, la consejera ha llegado a manifestar públicamente que el debate generado «son los últimos coletazos y que, finalmente, [la Religión] saldrá de las aulas».

Se vulneran derechos

Desde Apprece, el sindicato de profesores de Religión en centros estatales, su presidente, José María Guardia, afirma que la decisión de la Junta de Aragón «vulneraba el derecho de los alumnos y de los padres a la enseñanza de la Religión, al tiempo que, al reducirse la carga horaria, afectaba a los profesores». Además, recalca que la decisión se tomó con la opinión en contra del Consejo Consultivo de Aragón y a sabiendas de que se estaban incumpliendo los Acuerdos Iglesia-Estado. Explica estos ataques como «un pulso de un Gobierno del PSOE apoyado por Podemos, que exigió la reducción del horario de la asignatura a la mitad como condición».

En Andalucía, otra de las regiones donde más afectada se vio la materia, los tribunales también están poniendo las cosas en su sitio. Pero quedan frentes abiertos. En concreto, en Bachillerato, el recurso de los obispos andaluces consiguió que la asignatura se ofertase en todas las modalidades, ya que hasta entonces era imposible elegirla en la de Artes. La sentencia del mismo, según informan fuentes cercanas al proceso, no tardará en salir. Por contra, los recursos judiciales que se extienden a las otras etapas educativas –Primaria y ESO– todavía están por resolver. En el caso de Primaria, la Junta de Andalucía ha dejado en manos de los centros el impartir 90 o 45 minutos de clase de Religión y muchos han elegido la segunda opción, mientras que en Secundaria se ha eliminado una hora en el tercer curso.

Problema generalizado

Lo mismo que Andalucía y Aragón ha sucedido en Asturias, Baleares o Extremadura, donde los obispos presentaron un recurso contencioso-administrativo por la reducción de horas de la asignatura. Las dos primeras fueron pioneras en acudir a los tribunales, aunque con distinta suerte a la hora de recibir la cautelar, mientras que en Extremadura la polémica saltó este verano. Allí, los obispos, en un recurso conjunto, denunciaron la vulneración de derechos fundamentales de la Constitución y dejaron claro que van a representar «al 80 % de los padres que eligen para sus hijos la asignatura y a los jóvenes que la cursan».

Y mientras continúan estos procesos –tanto obispos como sindicatos son muy optimistas, pues creen que el Estado de Derecho está de su parte– se irán abriendo otros. Según ha informado a Alfa y Omega Rafael Martín, vicepresidente de Apprece, el sindicato va a interponer próximamente un recurso en Castilla y León por la reducción horaria en 4º, 5º y 6º de Primaria.

En definitiva, lo que reclaman obispos, padres y profesores es que se cumpla la ley y se respeten los Acuerdos Iglesia-Estado, un tratado internacional con rango de ley orgánica. Y recuerdan que nadie está obligado a cursarla, pues es voluntaria, aunque para los centros sea obligatorio ofertarla.