Carta de monseñor Osoro con motivo de la fiesta de la Almudena - Alfa y Omega

Carta de monseñor Osoro con motivo de la fiesta de la Almudena

Redacción

El próximo 9 de noviembre, Madrid celebra la fiesta de su patrona, la Virgen de la Almudena. Como cada año, ese día a las 11:00 horas habrá Misa en la Plaza Mayor y, a continuación, su imagen irá en procesión hasta la catedral de Santa María la Real de la Almudena. Para conocer los detalles de esta celebración y del resto de actividades en honor a la Virgen, puede visitarse la nueva página web de Actos Institucionales de la archidiócesis de Madrid: actosinstitucionales.archimadrid.com.

El arzobispo de Madrid, monseñor Carlos Osoro, ha querido invitar a todos los madrileños a sumarse a estos actos y, además de grabar un vídeo animando a ir a la Plaza Mayor, ha escrito la siguiente carta:

Queridos hermanos:

Cercana ya la fiesta de nuestra Madre y Patrona, Santa María la Real de la Almudena, os invito a participar en el Triduo, y a la Eucaristía el día 9 de Noviembre, a las 11:00 horas, en la Plaza Mayor, y a continuación a la procesión por las calles de Madrid.

Estamos invitados, en este día grande para todos los madrileños, a celebrar la fiesta de nuestra Madre. Madrid venera desde tiempo inmemorial como Patrona a la Virgen María y, de forma especial, desde el año 1085, en el que se encontró su imagen en el muro de la Cuesta de la Vega, de donde toma su nombre de «Almudena».

Desde el año 1646, en el que el pueblo de Madrid y su Concejo hizo el llamado Voto de la Villa, como acción de gracias a la Virgen por haberla salvado de tantas calamidades, los madrileños siguen fieles a dicho Voto: «asistir a la festividad de Nuestra Señora de la Almudena… perpetuamente por siempre jamás».

Por ello, en esta ocasión os convoco de nuevo a celebrar, como familia diocesana, este día en torno a la Virgen María. Os llamo a todos, pues la Virgen no tiene ni pone fronteras, todos son sus hijos.

El lema que hemos escogido es María, Madre de Misericordia, siguiendo al Papa Francisco que nos convoca a celebrar el Año de la Misericordia. Y, como gesto concreto, en la Ofrenda de flores a la Virgen se ofrecerán también alimentos no perecederos.

María nos abre y nos regala la puerta de la misericordia que es el mismo Jesucristo, y nos anima a acoger con entrañas fraternas a todos, especialmente a quienes en este momento están más necesitados, y nos invita a asumir en nuestra vida este compromisos esencial para la renovación y misión de la Iglesia.

El Papa Francisco nos dice:

«María atestigua que la misericordia del Hijo de Dios no conoce límites y alcanza a todos sin excluir a ninguno. Dirijamos a ella la antigua y siempre nueva oración Salve Regina, para que nunca se canse de volver a nosotros sus hijos misericordiosos, y nos haga dignos de contemplar el rostro de la misericordia, su Hijo Jesús» (M.V. 24).

Que Santa María la Real de la Almudena nos siga acompañando en el camino y haga de nosotros auténticos rostros de la Misericordia de Dios.

Con gran afecto os bendice,

+Carlos, arzobispo de Madrid