La religiosa canonizada por el Papa el pasado domingo visitó a su comunidad en Aldaia, Valencia, un mes antes de morir - Alfa y Omega

La religiosa canonizada por el Papa el pasado domingo visitó a su comunidad en Aldaia, Valencia, un mes antes de morir

La religiosa española canonizada por el papa Francisco el pasado domingo, María Isabel Salvat Romero (1926-1998), que adoptó el nombre de María de la Purísima de la Cruz, y fue superiora general de las Hermanas de la Compañía de la Cruz, realizó en la localidad valenciana de Aldaia su última visita a una comunidad religiosa antes de morir siendo entonces madre general de la congregación

AVAN

María Purísima de la Cruz visitó la comunidad de Aldaia en septiembre de 1998, un mes antes de morir ya que falleció el 31 de octubre de ese mismo año. En Aldaia, se reunió con las religiosas y conoció las obras de su actual residencia.

En su canonización el pasado domingo en Roma participó «una nutrida representación de nuestra comunidad cristiana, con más de cincuenta personas, entre ellas también religiosas», según han indicado hoy a la agencia AVAN fuentes de la congregación en Aldaia.

En la actualidad, la comunidad religiosa de Aldaia, la única de esta congregación en la archidiócesis de Valencia, está formada por diez religiosas de la Cruz, cuyo carisma es «vivir el evangelio, pobres con los pobres, para servir en ellos a Cristo pobre».

Por ello, las religiosas participaron este jueves, por la tarde, en la misa que celebró el cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, en acción de gracias por la canonización de la religiosa española junto al matrimonio francés formado por Louis Martin y Zélie Guérin, padres de Santa Teresita de Liseux, y el sacerdote italiano y fundador del Instituto de las Hijas del Oratorio, Vincenzo Grossi (1845 -1917), que también han sido declarados santos por el Papa.

Comunidad de Aldaia de las Hermanas de la Compañía de la Cruz

En 1943, «en plena postguerra, un grupo de madres, preocupadas por la educación cristiana de sus hijas, se propusieron emplear sus bienes y buscar una comunidad religiosa que pudiese formarlas abriendo una casa en Aldaia». Así, «entusiasmadas con este ideal y después de contactar con las Hermanas de la Cruz de Sevilla, fundadas por Santa Ángela de la Cruz», llegaron a esta localidad en 1945, «dedicándose a la enseñanza de las niñas de la población, buscando y ayudando a los pobres y enfermos en sus casas y pidiendo limosna para subsistir», según las mismas fuentes.

Esta comunidad «ejerció su misión educativa hasta los años ochenta, cuando cambiaron su actividad docente parta abrir una residencia para ancianas». Actualmente, «atienden a los pobres, visitan a los enfermos, y viven de la caridad».

Por otro lado, en la localidad valenciana de Silla, el cardenal Cañizares inauguró el pasado mes de septiembre el nuevo «Hogar Santa Ángela» para familias necesitadas, un proyecto solidario que, precisamente, toma como modelo a Santa Ángela de la Cruz, religiosa sevillana que se dedicó a ayudar a pobres y enfermos, cuya devoción está muy arraigada en la parroquia de San Roque y en el barrio.