América, puerta abierta a la misión - Alfa y Omega

El Año de la fe es una buena oportunidad para intensificar el testimonio de la caridad. La misión renueva la Iglesia, refuerza la fe y la identidad cristiana, da nuevo entusiasmo y nuevas motivaciones. Fue esa misma vitalidad la que llevó al Nuevo Mundo una legión de misioneros, que defendieron la dignidad de los indígenas y les transmitieron la fe en Jesucristo. Fue también por el ímpetu misionero que la fe suscitaba, por el que millares de sacerdotes diocesanos, de religiosos y religiosas, y laicos cooperadores de toda España, han proseguido hasta la actualidad ese empeño misionero.

Cabe destacar aquellos sacerdotes diocesanos que, acogidos al servicio de la Obra de Cooperación Sacerdotal Hispanoamericana (OCSHA) de la Conferencia Episcopal Española, dejaron su tierra y partieron para cooperar con aquellas Iglesias más necesitadas. De las Iglesias locales de España, cada año salen nuevas vocaciones misioneras para colaborar con aquellas que aún están en proceso de formación.

América Latina necesita una nueva evangelización ante la realidad del cambio tan profundo que se está operando en el interior de la sociedad americana. Para ello, la Iglesia ha asumido como principal compromiso misionero la conversión pastoral, tanto de las personas como de las estructuras de la Iglesia.

La experiencia de la misión ad gentes de la que tantos españoles han sido protagonistas, también ha de ayudar a la Iglesia en América Latina a asumir su compromiso en la solicitud apostólica en otros lugares de la tierra. No faltan en España numerosos sacerdotes provenientes de los países latinoamericanos que, con el permiso de sus respectivos obispos, colaboran activamente en la misión evangelizadora de ambientes que sufren la desertificación de la secularización y el abandono de la tradición católica. Acojámoslos con gratitud y cariño, atentos a sus necesidades. Que sean ellos los adelantados de esa «nueva primavera de la misión ad gentes» que esperan y auspician los obispos latinoamericanos.

Cardenal Marc Ouellet
Presidente de la Pontificia Comisión para América Latina
Del Mensaje para el Día de Hispanoamérica