Gentes: Javier Otaduy, profesor de la Universidad de Navarra - Alfa y Omega

Los jóvenes después de la JMJ van a salir más fuertes, más dispuestos «a permanecer firmes en la fe y a asumir la bella aventura de anunciarla y testimoniarla abiertamente con su propia vida». Los cristianos no debemos silenciar el santo nombre de Dios. No es una cuestión de fideísmo, es una cuestión de racionalidad.