«Se respira buen rollo, aquí nadie va a cazarte la pierna» - Alfa y Omega

«Se respira buen rollo, aquí nadie va a cazarte la pierna»

Javier quiso hacer realidad la propuesta del Papa Francisco de hacer lío. Creó, entonces, la Copa Católica, un campeonato de fútbol en el que ya han participado 500 personas y que pronto tendrá una réplica en Málaga, Colombia, México y Sudáfrica. También han exportado la idea a la JMJ de Cracovia, donde organizaran un mundial de fútbol

José Calderero de Aldecoa

Tiene nombre de entrenador de fútbol -comparte nombre con el que fuera entrenador del Real Zaragoza, de Osasuna, del Atlético de Madrid o de la Selección de México- pero este Javier Aguirre no dirige un equipo de fútbol sino todo un campeonato. Con 25 años, este madrileño es uno de los responsables de la Copa Católica de Madrid, una liga de fútbol mixta interparroquial para jóvenes de entre 16 y 35 años.

La historia de esta competición está muy vinculada a la historia de las JMJ. En la de Madrid, Javier conoció a Gabriel, un joven brasileño. En la JMJ de Brasil, fue Javier el que visitó a Gabriel. Y «allí el Papa Francisco nos animó a hacer lío, a salir a la calle. Estuvimos pensando en las palabras del Papa y, posteriormente, conocimos la Clericus Cup –el campeonato de fútbol entre sacerdotes y seminaristas de Roma- Se nos ocurrió organizar algo parecido pero entre los jóvenes de Madrid. El fútbol es una buena forma de unir a la gente», explica Javier Aguirre.

Pusieron en marcha la iniciativa y ahora la Copa Católica de Madrid celebra su segunda edición. De momento son más de 500 personas, entre equipos, voluntarios y público, las que han participado. Pero la iniciativa ha gustado incluso fuera de nuestras fronteras. «Nos han escrito de varias partes del mundo para replicar la iniciativa: Sudáfrica, Málaga, Colombia y México», asegura Aguirre. Y con tantas peticiones internacionales surgió una nueva idea: montar un mundial de fútbol durante la JMJ de Cracovia. «Escribimos un email a los organizadores y coincidió que Gabriel iba a ir allí de turismo. Se pasó por la oficina de voluntariado de la Jornada y les explicó en persona la iniciativa. Vieron que era un torneo que gusta mucho entre los jóvenes y aceptaron la propuesta. Ahora estamos dándole forma», cuenta Javier.

Deporte y evangelización

Según los organizadores, el objetivo principal es la evangelización. «Los equipos están formados por gente de la parroquia. Pero luego hay mucha gente que se ha ido desvinculando de la parroquia y les puedes volver a involucrar con el fútbol». También hay gente que se siente atraída «por el buen rollo que hay en los partidos. Nos ve, o viene a algún partido, y el ambiente les gusta. Se respira buen rollo, aquí nadie va a cazarte la pierna», cuenta.

Pero el buen ambiente no es la única nota católica del torneo. Antes de cada encuentro se rezan Laudes. También hay una oración al acabar los partidos. Incluso se celebra la Misa en el campo durante el torneo para los participantes.