La embajadora de Pakistán en EE. UU. se enfrenta a la pena de muerte, por defender a Asia Bibi - Alfa y Omega

La embajadora de Pakistán en EE. UU. se enfrenta a la pena de muerte, por defender a Asia Bibi

La Corte Suprema de Pakistán ha absuelto finalmente a Rimsha Masih del delito de blasfemia. El caso de esta joven cristiana discapacitada mental fue reabierto de forma sorprendente, a pesar de las evidencias sobre los abusos en este caso. Según la agencia vaticana Fides, hay 16 personas, en Pakistán, en el corredor de la muerte, por supuestos delitos de blasfemia. El caso más conocido es el de Asia Bibi. Una parlamentaria musulmana que la defendió, la actual embajadora en EE. UU., Sherry Rehman, se enfrenta ahora a esta misma suerte

Redacción

Sherry Rehman, parlamentaria musulmana y actual embajadora paquistaní en Estados Unidos, será juzgada por blasfemia: lo ha decidido la Corte Suprema, con un clamoroso pronunciamiento que reabre el debate sobre la ley de blasfemia en Pakistán. La mujer fue denunciada en febrero de 2011 por un comerciante, que la acusó de haber cometido blasfemia durante un programa de televisión. Su delito fue defender a Asia Bibi y presentar en el Parlamento de Pakistán una propuesta para la revisión de la ley sobre la blasfemia, a fin de evitar abusos. Tras la polémica suscitada, y después de los asesinatos de Salman Taseer (gobernador musulmán que defendió a Asia Bibi) y del ministro cristiano Shahbaz Bhatti, Rehman, en peligro de muerte, retiró la moción.

La policía de Multan retiró entonces las acusaciones, un tribunal de Lahore rechazó la denuncia y la historia parecía cerrada. Ahora, en el recurso de casación presentado ante el Tribunal Supremo, los jueces han declarado la admisibilidad de los cargos. La mujer será procesada y se enfrenta a pena de muerte o cadena perpetua.

Absolución de Rimsha

La decisión de la Corte Supremo ensombrece la buena noticia de la absolución de Rimsha Masih, tras una sola audiencia, celebrada el 15 de enero. La joven, discapacitada mental, fue absuelta en noviembre de una acusación de blasfemia, ante la evidencia de que hubo multitud de abusos en su caso (varios testigos señalan que fue el imán que le acusó quien que colocó unas hojas del Corán entre papeles que iba a quemar la chica). El recurso de los fiscales a la más alta instancia judicial del país se debió seguramente a las presiones de los radicales islamistas, cuyas amenazas hacen que la joven y su familia permanezcan escondidos en un lugar seguro y decenas de vecinos suyos hayan abandonado sus hogares

Según la agencia Fides, ha otros 36 casos de condenas por blasfemia en Pakistán, de las cuales 16 son a muerte. Además del caso de Asia Bibi, también es muy conocido el del cristiano Younis Masih, cristiano pakistaní, condenado a muerte por blasfemia , en la cárcel desde hace más de 7 años.

La agencia Fides informa de el prisionero ha sufrido un ataque cardíaco el 8 de enero y se encuentra en grave peligro de muerte. Mientras tanto, un grupo de abogados cristianos ha presentado un recurso de apelación ante la Alta Corte de Lahore, para iniciar el proceso de apelación.

Younis Masih fue condenado a muerte en 2007 por un tribunal de primera instancia en juicio sumario a puerta cerrada y sin las debidas garantías procesales, algo habitual en estos casos. Younis Masih tenía 27 años cuando fue detenido por supuesta blasfemia el 10 de septiembre de 2005. Una turba de 400 hombres, armados con palos y ladrillos, atacaron y saquearon las casas del barrio de Chungi Amer Sidhu, en Lahore, donde vivía Younis Masih. Su esposa, Meena, fue golpeada violentamente, y más de 100 familias cristianas huyeron de la zona para salvarse. Fue acusado de blasfemia después de un altercado con un vecino musulmán al que había pedido que bajase el volumen de la música proveniente de su casa. Younis fue golpeado casi hasta la muerte, después las mezquitas de la zona comenzaron a incitar a los musulmanes locales, acusando a Younis de haber hecho comentarios despectivos contra el profeta Mahoma. La policía, bajo presión de la multitud, registró una denuncia contra él y lo arrestaron.

Fides / Redacción