Cáritas y el Servicio Jesuita a Migrantes califican de «beneficioso» el nuevo reglamento de los CIES - Alfa y Omega

Cáritas y el Servicio Jesuita a Migrantes califican de «beneficioso» el nuevo reglamento de los CIES

Las graves insuficiencias de los 8 Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE) que hay en España han sido señalados, en los últimos años, por diversas instituciones, como ONGs, la Fiscalía, el Defensor del Pueblo y los Juzgados de control. En numerosos informes se ha constatado que las limitaciones de derechos de los extranjeros internados van mucho más allá de la restricción a la libertad de movimiento, como es, a priori, su finalidad. En 2009, la Ley de Extranjería fijó un plazo de seis meses para aprobar un reglamento regulador de estos centros, que ha tardado más de cuatro años en ver la luz

Cristina Sánchez Aguilar

Entre otras, hay novedades como la figura de un funcionario (no un policía), con el cargo de Administrador, que coordinará todos los servicios asistenciales y logísticos. También se celebrarán reuniones periódicas de seguimiento entre la Comisaría General de Extranjería y Fronteras, los directores de los centros y representantes de las instituciones que trabajen dentro para analizar incidencias, quejas y propuestas.

Otros avances son, por ejemplo, que el servicio médico dependerá de un médico de la Administración, y habrá un ATS como auxiliar. Habrá servicios jurídicos en los centros, y los internos podrán entrevistarse con el director para formular peticiones y quejas. Los funcionarios policiales recibirán formación específica en extranjería y se separarán a los internos con condena penal de los demás. Finalmente, una partida de 3 millones de euros irá destinada a los intérpretes, la asistencia sanitaria, los servicios sociales y suministros como kits de aseo, vestuario o productos farmacéuticos. Además, se mejorarán las celdas y los espacios de ocio, y todo el dinero procederá de los fondos europeos y ajustes ministeriales, sin aumento del gasto público.

Estos avances son alabados por un comunicado conjunto entre Cáritas y el Servicio Jesuita a Migrantes, que valoran positivamente el nuevo Reglamento y lo califican como «mejor que los textos iniciales». También reconocen que «beneficia tanto a las personas internas como a los funcionarios y demás personal de los centros, pero, sobre todo, nos beneficia a todos como sociedad».

Pero también hay aspectos negativos, como señalan las instituciones. Uno es que «no recoge muchas de las resoluciones de carácter general de los Juzgados de control de los CIE, recomendaciones de Defensor del Pueblo y de Fiscalía y observaciones de las organizaciones sociales que acompañan el día a día de las personas internas», quedando fuera aspectos muy importantes, que detalla el comunicado y reproducimos a continuación:

– «El Reglamento regula las condiciones de funcionamiento de los CIE, pero no aborda los criterios de ingreso. Recordamos que el internamiento es una medida excepcional, último recurso y que debe adoptarse valorando las circunstancias concretas del caso en el momento de solicitar o autorizar el internamiento, sin que sea suficiente la existencia de una orden de expulsión o devolución».

– «Las funciones atribuidas a los servicios sociales no son acordes con la importancia de estos servicios en la detección y protección, por ejemplo, de posibles solicitantes de asilo, menores, víctimas de trata o violencia sexual, y otros perfiles vulnerables».

– «No se incluye el deber de informar y explicar a las personas extranjeras las causas por las que están en el CIE así como de las resoluciones administrativas y judiciales que se vayan produciendo durante su estancia».

– «No se recoge la obligación de que el traslado de personas desde los CETI de Ceuta y Melilla a los CIE vaya acompañado del traslado y entrega de su historial médico, a pesar de las implicaciones que ello tuvo en 2011 para la vida de Samba Martine y del protocolo de derivación médica que en 2013 firmaron el Ministerio del Interior y el Ministerio de Empleo y Seguridad Social y que a fecha de hoy, no se está cumpliendo».

– «La tramitación de quejas al Juzgado de control de cada centro no aúna el secreto de las comunicaciones y el derecho a la intimidad de las personas internadas con el principio de la celeridad, asegurando que estas quejas se entreguen al Juez de control rápidamente».

– «Es incomprensible y alarmante la introducción de vigilancia con armas de fuego con carácter general en los CIE. Los CIE siempre han sido espacios sin armas de fuego».

– «Se excluye del ámbito reglamentario las Salas de inadmisión de los aeropuertos, dejando esos espacios en un limbo legal».

Finalmente, el comunicado señala que tanto Cáritas como el Servicio Jesuita a Migrantes seguirá trabajando para que existan alternativas al internamiento y recuerdan «que seguiremos pidiendo el cierre de los Centros de Internamiento de Extranjeros, mientras continuamos con el acompañamiento a las personas internas y sus familias».