David Jiménez Herrero, OCD: «Soy carmelita por culpa de la Santa» - Alfa y Omega

David Jiménez Herrero, OCD: «Soy carmelita por culpa de la Santa»

Javier Valiente

Eres el prior del convento carmelita de Ávila, donde nació santa Teresa. ¡Menuda responsabilidad!
El V Centenario ha sido un año muy especial, muy ilusionante. Esta es una casa donde viene mucha gente, pero este año muchísima más se acerca hasta aquí para conocer algo de ella, para aprender su modo de oración, su modo de vida. Ha habido momentos puntuales preciosos, como el Encuentro Europeo de Jóvenes o las visitas de carmelitas con grupos de todo el mundo; pero yo casi me quedo más con el goteo diario de gente que te cuenta su experiencia.

Teresa de Jesús religiosa, escritora, fundadora, reformadora, Doctora de la Iglesia, mujer… ¿fue feminista?
No como lo entendemos hoy, pero sí reivindica su ser mujer. Ella tiene un concepto de ser mujer importante, de que la mujer en la Iglesia no está apartada. Teresa entiende que las mujeres también forman parte activa del mundo y de la Iglesia.

Y tú, ¿por qué te haces carmelita?
Gran parte de culpa la tiene la Santa (ríe). Su vida, sus escritos, me cautivaron. Yo estaba en el seminario diocesano de Ávila, pero conocer a santa Teresa y a una comunidad de carmelitas hizo que me decidiera por este camino.

¿Qué hace un carmelita?
Lo importante de la vida del Carmelo es la vida en comunidad, una vida dedicada a Dios y a los hermanos. La vida de oración es muy importante; no solo la oración litúrgica, sino también la oración personal.

¿Y en el día a día?
Cada uno tiene una tarea, como en una familia. Además, unos se dedican al estudio, la investigación y la difusión de la espiritualidad carmelitana.

¿Qué tipo de obras lleváis adelante?
Tenemos parroquias, algún colegio, aunque no es nuestra dedicación principal. Nuestras casas son casas abiertas a la espiritualidad, a través de la confesión, retiros, dirección espiritual, etc. Esta es la dedicación primordial de cada una de nuestras casas.

Parece que crece el deseo de espiritualidad, ¿no?
Es curioso. En medio del ruido, de las prisas, hay mucha gente que llama a nuestras puertas pidiendo aquello que nos enseñó Teresa de Jesús, que es entrar en el castillo interior, abrir esa puerta para encontrarnos con Dios. Muestran esa necesidad de hacerle a Él un hueco en su vida, sin necesidad de apartarse del mundo, sino viviendo el encuentro con Dios en el día a día…

Porque entre los pucheros sigue siendo posible encontrar a Dios…
Eso es, claro. La experiencia de la Santa es muy realista, y nos dice que el verdadero orante no es el que se aparta de los demás, es el que verdaderamente ama en todas las partes.

Así que oración y vida cristiana son cosa de amor.
Claro. El itinerario que nos dibuja santa Teresa es un itinerario de amor, no de cumplimiento; es de personas enamoradas. La experiencia de Dios es dejarse enamorar.

Y la vida consagrada también es así…
Efectivamente, la base es la relación de enamoramiento. Es el amor por Jesús el que te hace estar aquí y entregarte a los demás.

¿Qué dificultades encuentras tú?
Somos personas, hay dificultades y malentendidos en la vida comunitaria, aunque esto, que puede ser lo más difícil –vivir con personas que no has elegido tú–, a la vez es lo más hermoso, el llegar a querer y ver en las personas que tienes alrededor el camino que Dios quiere para ti.

David Jiménez Herrero, OCD

Abulense de 38 años, el último libro que ha leído ha sido Biografía de santa Teresa de Jesús, de Daniel de Pablo. Realizó el aspirantado y postulantado en los carmelitas de Toledo, y el noviciado en el desierto de las Palmas (Castellón). Estudió Teología en Salamanca, realizó la profesión perpetua en el 2000 y, en 2001, fue ordenado sacerdote. También periodista, ha estado encargado de la comunicación en la Curia central de su Orden en Roma. Trabajó en la CONFER, en la agencia de noticias IVICON. Actualmente es el prior del convento carmelita de Ávila, la primera casa de la Orden, y dirige la revista Teresa de Jesús.