Monseñor Luis Ladaria, investido doctor honoris causa por la Universidad Pontificia de Salamanca - Alfa y Omega

Monseñor Luis Ladaria, investido doctor honoris causa por la Universidad Pontificia de Salamanca

El presidente de la Conferencia Episcopal Española, monseñor Ricardo Blázquez, presidió el lunes el acto que se celebró en el Aula Magna de la Universidad Pontificia de Salamanca. Monseñor Blázquez señaló que «monseñor Ladaria Ferrer es un excelente profesor que ahora desempeña un cargo muy importante para la Iglesia»

Redacción
Monseñor Luis Ladaria y Jacinto Núñez

El arzobispo secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe, monseñor Luis Fernando Ladaria Ferre,r SJ, fue investido este lunes doctor honoris causa por la Universidad Pontificia de Salamanca. La ceremonia tuvo lugar en el Aula Magna de dicha institución, a la que acudió por primera vez monseñor Blázquez como Presidente de la Conferencia Episcopal. Blázquez señaló que «se trata de un acto relevante para la Conferencia Episcopal, ya que nos sentimos honrados en una ceremonia que resulta tan grata para todos nosotros. Monseñor Ladaria Ferrer es un excelente profesor que ahora desempeña un cargo muy importante para la Iglesia».

Monseñor Ricardo Blázquez estuvo 14 años como profesor en la UPSA y aseguró que «se siente muy a gusto por venir a la Universidad Pontificia, que cada día está más remodelada». También añadió que «aún no tenemos confirmación de que el Papa Francisco visite España con motivo del V Centenario del nacimiento de Santa Teresa». En el acto también estuvo presente monseñor Carlos López, obispo de Salamanca y Gran Canciller de la UPSA; y los provinciales jesuitas de España y Aragón, Francisco José Ruiz Pérez y Vicente Durá.

El rector de la UPSA, Ángel Galindo, aseguró que este acto se enmarca dentro de la celebración del 75 aniversario de la restauración de la Universidad Pontificia en 1940, después de haber sido suprimida por el liberalismo en el siglo XIX. «La Universidad nació en torno a las materias de Cánones y Teología y este homenaje y honoris causa es una apuesta para reivindicar y actualizar el origen de la Universidad de Salamanca hace ocho siglos que, precisamente, nació en la Catedral, en las Escuelas Catedralicias, con el título de Universidad Pontificia y Universidad Real; por eso damos también este honoris causa a esta gran personalidad como es el padre Ladaria, para recordar que la Universidad de Salamanca nace con y desde la Teología y el Derecho», aseguró el Rector.

«Un sabio en su materia»

Galindo definió al doctorado como «un intelectual, no sólo en el campo de la Antropología teológica, sino de las Ciencias Sociales, en la medida en que la Teología está en relación con ellas. El padre Ladaria es un sabio en su materia y está ayudando con mucha fuerza a la expresión de la Teología en toda la Iglesia en relación con otras ciencias», ha afirmado el rector de la UPSA.

Monseñor Luis F. Ladaria, en su lección magistral titulada Fons et origo. Monoteísmo y Monarquía del Padre, reflexionó acerca de la originalidad de la noción cristiana de Dios a partir de la revelación neotestamentaria de la paternidad divina. En su discurso señaló que «en el Antiguo Testamento, Dios es sobre todo el padre del pueblo de Israel, a partir de esa paternidad general se llega a la afirmación de esta relación con personas concretas, el rey, el justo. En el Nuevo Testamento, el proceso es justamente el inverso: Dios es, ante todo y sobre todo, el Padre de Jesús; y este es el hijo por antonomasia, cabeza y principio de la humanidad nueva».

Además, explicó que la revolución, si se puede hablar así, del monoteísmo del Nuevo Testamento, no es en el fondo más que la que se desprende de la vida y la enseñanza de Jesús. «Y además, junto al Padre y al Hijo, el Nuevo Testamento confiesa al Espíritu Santo, sin el cual los efectos de la acción salvadora de Jesús no se pueden penetrar en lo profundo del corazón humano, y en concreto, no es posible la vida filial. Padre, Hijo y Espíritu Santo, tres personas divinas, un solo Dios. Los cristianos han entendido la fe en la Trinidad como la forma más elevada del monoteísmo. La Trinidad tiene, por tanto, como principio único el Padre de nuestro Señor Jesucristo y Padre nuestro», reflexionó el doctorado.

Estudio de las fuentes

El Decano de la Facultad de Teología de la UPSA, Jacinto Núñez Regodón, fue el padrino del doctorado, y en la Laudatio si expuso los motivos por los cuales el Consejo de la Facultad de Teología hizo la propuesta de este honoris causa. Aparte de por el extenso curriculum del doctorado, señaló tres notas características de su quehacer teológico como son la positividad, por el estudio de fuentes y sobre todo de la tradición patrística; la sistematicidad y la claridad.

Además, Núñez resaltó otros aspectos de la tarea teológica y eclesial de monseñor Ladaria, más allá de la actividad académica, como que en 1995 fue nombrado Consultor de la Congregación para la Doctrina de la Fe. De esta forma, a su labor académica y docente añadía un cualificado servicio a la Teología en su relación con el Magisterio de la Iglesia. «Este servicio alcanzaría su cima al ser nombrado arzobispo Secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe por el Papa Benedicto XVI el 9 de julio de 2008. Recibiría la ordenación episcopal el día 26 de ese mismo mes», señaló.

El Rector de la UPSA, Ángel Galindo, dio la bienvenida a monseñor Ladaria, que forma ya parte del Claustro universitario, e hizo un repaso por los especialistas en Teología, Filosofía y Derecho Canónico que han pasado por las aulas desde el siglo XIII en su primera fase y, desde 1940, en su etapa más reciente. «Esta universidad tiene la voluntad y el encargo de seguir reflexionando desde sus aulas sobre el pensamiento de estos gigantes de la Teología, de la Filosofía y del Derecho Canónico. Sin la reflexión sobre estas materias y estos autores, Salamanca perdería el corazón y su sabor humanista. Nuestra universidad quiere potenciar algo muy presente en la reflexión del teólogo Luis Francisco Ladaria como es la dignidad de la persona humana, imagen de Dios, y la libertad del hombre, base de la auténtica autonomía universitaria y libertad de cátedra».

Formación humana y cívica

Pero -añadió-, «además de entender que el conocimiento y la formación de profesionales son importantes, somos conscientes de que hemos de implicarnos en la formación humana y cívica de los estudiantes y profesores, con el objeto de estar estrechamente vinculados a las necesidades sociales. Sabemos que debemos colaborar con el resto de instituciones, sociedades, colectivos y personas que formamos la gran sociedad. Desde este horizonte se legitimará el liderazgo de la Universidad del futuro. La autonomía universitaria, en diálogo que no sometimiento, con las entidades políticas y económicas favorecerá a que la Universidad puede cumplir mejor su razón de ser», señaló en la gratulatoria.

Además, Galindo resaltó que «la Teología tiene un reto profundo de evidenciar para el hombre de hoy una imagen comprensible del Dios cristiano, tal y como ha venido siendo presentado a lo largo de los siglos, pero posiblemente liberándolo de todo aquello que puede resultar externo o fruto de la cultura de un momento determinado. La Teología tiene como finalidad última llevar a los hombres al encuentro definitivo con Dios y esto, de manera razonable. En este sentido, una Universidad Pontificia erradicada en Salamanca ha de tener también el sabor del pensamiento desarrollado en sus aulas durante siglos, haciendo una teología crítica; pero profundamente honesta en cada momento».