La Iglesia pide democracia para Hong Kong - Alfa y Omega

La Iglesia pide democracia para Hong Kong

El cardenal Joseph Zen se ha convertido en el mayor defensor del referéndum ilegal convocado del 20 al 22 de junio en Hong Kong por el movimiento Occupy Central, que pide a Pekín la libre elección de gobernador en 2017 y otras reformas democratizadoras

Ricardo Benjumea

El arzobispo emérito de Hong Kong, de 82 años, inició el sábado una marcha a pie de 84 horas (12 horas al día), para animar a la participación en esta consulta ciudadana. El interés por la convocatoria ha aumentado significativamente con la publicación, el 10 de junio, del Libro Blanco Aplicación de la política «Un país, dos sistemas» en la Región administrativa especial de Hong Kong. En este documento oficial, las autoridades chinas -contraviniendo la promesa de autonomía por 50 años, desde la reincorporación a China, en 1997, de esta antigua colonia británica- reafirman el control total de Pekín sobre Hong Kong, y supeditan toda autonomía de cualquier cargo público a su «amor a la madre patria», lo que en la jerga local se entiende como adhesión al Partido Comunista.

«Podéis atarme, eliminarme o decapitarme, pero nunca haréis de mí un esclavo», fue el desafiante mensaje que lanzó el purpurado a las autoridades en una entrevista radiofónica, en la que afirmó que «no hay espacio para el compromiso con el régimen». No tan entusiasta, sin embargo, es su apoyo a la propuesta del movimiento Occupy Central de, al modo del movimiento Occupy Wall Street, ocupar la zona financiera de la ciudad, si el Gobierno impide la consulta.

La Iglesia teme una reacción violenta por parte del régimen. De ahí el tono mucho más comedido del sucesor de Zen, el cardenal John Tong, que sin embargo, defiende también la consulta. En un artículo publicado en el 26 de mayo el periódico diocesano, el arzobispo de Hong Kong afirmaba que la democracia es necesaria para el bienestar de los honkoneses. Además, el movimiento diocesano Justicia y Paz ha difundido en todas las parroquias folletos explicativos de 28 páginas.

El referéndum se celebra poco después del 25 aniversario de la matanza de Tiananmen. La efeméride apenas ha tenido eco público, dado que el régimen ha extremado la censura. China vive un momento de aumento de la represión política contra la disidencia. Los cristianos son también víctimas de un mayor hostigamiento. Según un documento interno del partido en la provincia de Zhejiang, difundido hace unas semanas por el New York Times, el régimen considera que el cristianismo se ha vuelto «demasiado popular», y quiere frenar su crecimiento.